La deuda española vuelve a resentirse en el mercado por la crisis de Irlanda
- El Tesoro Público adjudica menos obligaciones y tiene que pagar más interés
- Las dos últimas emisiones se han saldado con una mayor coste de la deuda
El Tesoro Público ha adjudicado 3.654,57 millones de euros en obligaciones a 10 y 30 años con un interés del 4,632% y del 5,498%, respectivamente, muy por encima del rendimiento ofrecido en las anteriores, debido a la crisis que viven los mercados por la incertidumbre del rescate de Irlanda.
Según datos del mercado, el importe adjudicado se encuentra en la banda de 3.000 a 4.000 millones que pretendía obtener el Tesoro Público, pero se sitúa ligeramente por debajo de los 3.664,3 millones colocados en la subasta anterior.
En cuanto al interés, el que más ha subido ha sido el de las obligaciones a 30 años, que pasó del 4,791% del 21 de octubre al 5,498% de esta subasta, en tanto que el de las obligaciones a 10 años ha avanzado hasta el 4,632%, en comparación con el 4,164% de la puja anterior, que se celebró el 16 de septiembre.
Las obligaciones a 30 años se disparan
La deuda a 10 años fue la que menos interés suscitó respecto a la anterior subasta, ya que han colocado 2.586,12 millones, en comparación con los 2.723,06 millones de la anterior, con una demanda también inferior.
En concreto, los inversores han pedido 4.748,15 millones, una cifra menor que los 6.319,5 millones solicitados el pasado 16 de septiembre, aunque casi duplicó la cantidad finalmente adjudicada.
En cuanto a las obligaciones a 30 años, el fuerte incremento del interés ha hecho que resultaran más atractivas y que los inversores solicitaran 2.193,65 millones, de los que se adjudicaron 1.068,45 millones. En la anterior puja, del 21 de octubre, los inversores habían pedido 1.341,28 millones, de los que se colocaron 941,28 millones.
Salgado defiende que los costes son "razonables"
La subasta celebrada este jueves por el Tesoro Público es la segunda que tiene lugar esta semana en medio de la incertidumbre sobre un posible rescate financiero a Irlanda, que ha afectado a la deuda soberana de varios países.
De hecho, tanto el diferencial de la deuda soberana como los seguros de impagos de deuda (CDS) de España, Portugal, Grecia e Irlanda alcanzaron la semana pasada máximos desde la creación del euro, incluso por encima de los niveles previos a la publicación de las pruebas de estrés a las que se sometieron las entidades financieras europeas en julio.
Pese al incremento registrado durante esta semana, la ministra de Economía y Hacienda, Elena Salgado, ha asegurado que las emisiones de deuda pública del Tesoro "siguen estando en costes muy razonables", recordando que el coste de las letras y las obligaciones estaban "en mínimos". A su juicio, las emisiones son "un signo de confianza en la economía española".