Sarkozy ataca a la prensa para justificar el 'Karachigate': "Hasta mañana, amigos pedófilos"

• La prensa le interrogó sobre el pago de sobornos a Pakistán en los 90
• Sarkozy justificó lo absurdo de acusar sin pruebas llamando pedófila a la prensa

El presidente francés, Nicolas Sarkozy, es conocido por sus relaciones, a menudo difíciles, con los periodistas.

Sarkozy ha vuelto a perder la paciencia con la prensa. "Adiós, amigos pedófilos", se despidió este fin de semana de un grupo de periodistas en una rueda de prensa al margen de la cumbre de la OTAN en Lisboa.

El presidente francés no pudo soportar que en un encuentro privado con la prensa, los periodistas le interrogaran sobre las comisiones que Francia pagó en 1994 a Pakistán a  cambio de un contrato para venderle tres submarinos.

"Y tú. No tengo nada en contra de ti, pero al parecer eres un pedófilo...¿Quién me lo ha dicho? Es mi opinión personal. ¿Puedes justificarlo?". Fue la respuesta del mandatario francés, que intentaba demostrar, según él, lo absurdo de hacer acusaciones sin fundamento, tal y como recoge el semanario L'Express que ha sacado a la luz los comentarios de Sarkozy tras los focos.

En una rueda de prensa el pasado fin de semana que era "off the record", es decir, que sus comentarios no podían ser hechos públicos, Sarkozy lanzó una diatriba contra la publicación de información sin contrastar, señalando que los periodistas deben revisar sus hechos y no sólo hacer suposiciones al escribir reportajes

“Nadie se cree que yo organizaría sobornos“

"El mundo se ha vuelto loco. Ninguno de ustedes que se cree que yo organizaría comisiones y sobornos sobre submarinos en Pakistán. Esto es increíble", afirmó Sarkozy, para a continuación tratar a un periodista de pedófilo y despedirse de los presentes. "Hasta mañana mis amigos pedófilos.

Bajo nivel de popularidad

El ya denominado como 'Karachigate' le ha cogido a Sarkozy con su nivel de popularidad por los suelos y cuando parecía disfrutar de un respiro tras el escándalo del 'caso Bettencourt' que salpicó a su gobierno.

Al parecer, la historia se remonta a la década de los 90, cuando se firmó un acuerdo de venta de submarinos entre Francia y Pakistán con el beneplácito del ministro de Presupuesto que, por aquel entonces, no era otro que el propio Sarkozy. Según los medios franceses, el gobierno galo pagó comisiones por ese acuerdo a Pakistán y ese dinero regresó en forma de "retrocomisiones" para financiar supuestamente la campaña presidencial del entonces primer ministro Edouard Balladur. Una campaña de la que era portavoz, curiosamente, Nicolas Sarkozy.

En 1995, cuando Jacques Chirac le gana en las elecciones a Balladur, el  mandatario decide poner fin a las comisiones y este cese del pago a oficiales  pakistaníes pudo motivar el atentado en 2002 contra once ciudadanos franceses que trabajan en el proyecto de los submarinos en Karachi,  según el abogado de las víctimas.

La ira de Sarkozy, "comprensible"

El caso está ocupando las portadas de los  diarios franceses en los últimos días, ya que, aunque las autoridades pakistaníes atribuyeron el ataque a fundamentalistas islámicos, los jueces que investigan el caso han pedido informes y tener acceso a archivos clasificados como secreto de defensa para  poder esclarecer qué ocurrió y si el contrato de los submarinos y los pagos a intermediarios están relacionados con el ataque.

Los medios franceses han informado este martes de que los investigadores están revisando documentos que datan de 2006 y dirigidos a Sarkozy en relación a los pagos relacionados con los contratos de los submarinos.

"Tengo serias sospechas de que haya habido pagos retroactivos ilegales",  ha asegurado el azote político de Sarkozy, el ex primer ministro Dominique de Villepin, para avivar aún más la polémica.

El recién nombrado ministro de Defensa, Alain Juppé ha defendido que la ira de Sarkozy como "comprensible" y, como primer ministro de Chirac en 1995, ha indicado que el pago de dichas tasas a intermediarios extranjeros era legal en ese momento.