México admite el descontrol en ciertas zonas del país por el narcotráfico, según Wikileaks
- Las autoridades admiten que el tráfico de drogas "daña su reputación"
- EE.UU. desconfía de su capacidad para hacer frente a los 'narcos'
Según revelan nuevos telegramas diplomáticos estadounidenses filtrados por Wikileaks, un ex alto funcionario mexicano dio a entender durante una reunión con representantes de la Fiscalía General de EE.UU. en octubre del 2009 que el Gobierno había perdido el control sobre ciertas partes del país por el narcotráfico, algo que nunca ha reconocido públicamente ningún miembro del Gobierno.
Uno de los asistentes a la reunión, el entonces subsecretario de Gobierno de la Secretaría de Gobernación, Gerónimo Gutiérrez, afirmó durante el encuentro que la guerra contra el narcotráfico "está dañando la reputación internacional de México, dañando las inversiones extranjeras y llevando a una sensación de Gobierno impotente".
'Limpiezas' simbólicas
En uno de los cables, fechado en octubre de 2009, el embajador de EE.UU. en México, Carlos Pascual, explica que representantes del gobierno mexicano indicaron en la reunión que sería conveniente concentrar los esfuerzos conjuntos en "dos o tres ciudades violentas". Los funcionarios mexicanos sugirieron empezar en lugares como Ciudad Juárez y Tijuana su ofensiva contra el narcotráfico.
"Ellos creen -explica el funcionario estadounidense en el cable- que el simbolismo de ganar algunas de las ciudades más violentas sería poderoso, y enviaría una señal al resto del país de que la lucha contra el crimen organizado puede ser ganada, y serviría para combatir así la actual sensación de impotencia que sienten muchos mexicanos".
Los cables destacan además la creciente preocupación de Washington con la situación que vive México y prueba de ello es el "incesante" intercambio de telegramas diplomáticos entre ambos países.
En uno de esos mensajes, de diciembre del 2009, la jefa de la diplomacia estadounidense, Hillary Clinton, pregunta cómo le está afectando al presidente Felipe Calderón en su personalidad y su forma de gobernar las noticias adversas de la guerra contra el narcotráfico y la crisis económica.
Desconfianza de EE.UU.
Los nuevos documentos revelan también la desconfianza de EE.UU. sobre la capacidad de México para luchar eficazmente contra el narcotráfico debido a la rivalidad entre los cuerpos de seguridad, la "generalizada" corrupción oficial y la incapacidad manifiesta del Ejército para reunir pruebas que incriminen a sus detenidos.
Según los documentos redactados desde la embajada estadounidense en México "el éxito de un organismo se ve como el fracaso de otro" y "solo el 2% de los detenidos en Ciudad Juárez ha sido responsabilizado de un crimen".
La embajada de EE.UU. en México reconoce, de todos modos, en sus mensajes, el compromiso "sin precedentes" del Gobierno de Calderón en la lucha contra el narcotráfico. Aun así, pone de manifiesto en varios de sus informes la nula preparación del Ejército: "Es lento y tiene aversión al riesgo", menciona uno de los cables.
“El Ejército mexicano es lento y tiene aversión al riesgo“
Las reiteradas críticas al Ejército "contrastan" con los elogios que la Embajada dedica a la Marina, especialmente tras la operación que condujo a la captura y muerte del capo Arturo Beltrán Leyva en diciembre del 2009.
En general, los cables redactados por el embajador de EE.UU. en México hacen hincapié en tres ideas: la fiabilidad de la Marina, la torpeza del Ejército y la omnipresencia de EE.UU. en las cuestiones de seguridad de su vecino del sur.