La supervivencia de Berlusconi, pendiente del hilo de las mociones
- Este lunes se discuten las mociones de confianza y censura
- Fini ha anticipado que ya "no se fía" de Berlusconi
Diciembre no es el mes favorito de Silvio Berlusconi: hoy hace un año recibía el golpe físico más importante de su vida. Doce meses después de aquella agresión en la Plaza del Duomo de Milán, se apresta a recibir otro golpe; en este caso parlamentario. Hoy se discuten las mociones de confianza y censura. Mañana se votan.
Esta mañana se debate en el Senado la moción de confianza presentada por el partido en el poder. Es un trámite. Para la tarde queda el hueso duro de roer: la censura en la Cámara. Los números están muy apretados...
El iniciador de este fuego fatuo, Giafranco Fini dice que ya no se fía de Berlusconi, que por seguir en el poder es capaz de decir cualquier cosa y la contraria a la vez. Que sólo quiere continuar para librarse de la justicia. Por eso, advierte de que aunque Berlusconi gane la votación en la moción de censura, su partido, Futuro y Libertad, no será una corriente crítica en el gobierno, sino que pasa a la oposición
Como en un partido de baloncesto, un voto del último minuto inclinará la victoria de uno u otro lado. Pero gane quien gane, perderá la política. Aún con la victoria en el bolsillo, a partir de ahora, Berlusconi tendrá que caminar con las manos atadas. Tras las votaciones, la legislatura sólo avanzará a trompicones hasta que llegue el momento de convocar elecciones adelantadas.