La crisis reduce en un 27% las cirugías estéticas en España
- En 2009 se llevaron a cabo 105.000 operaciones de este tipo
- Nueve de cada diez intervenciones recayeron en mujeres
La crisis ha reducido el 27% las cirugías estéticas en España, que se sitúa en el puesto decimoquinto del mundo, con 105.000 operaciones de este tipo en 2009.
En ese período, nueve de cada diez intervenciones han recaído en mujeres, en tanto que, entre las menores de 30 años, el aumento mamario ha sido la opción preferente.
Las cifras se han presentado este viernes en Madrid, en rueda de prensa, y proceden del estudio de la Sociedad Española de Cirugía Plástica, Reparadora y Estética (SECPRE), denominado "La realidad de la Cirugía Estética en España", que es el primero con información contrastada de este tipo de cirugía a nivel nacional.
Las mujeres se operan mucho más que los hombres, principalmente liposucción y aumento de pecho, mientras que ellos prefieren la cirugía facial (párpados, nariz y orejas); la edad preferente en el conjunto de ambos grupos se sitúa en el tramo de entre 30 y 44 años, que representa el 43 por ciento del total.
Sólo por necesidad
Así lo han indicado el presidente de SECPRE, Ezequiel Rodríguez, el vicepresidente del capítulo Estética de la SECPRE y coordinador del estudio, Francisco Menéndez, y el presidente de la Fundación Docente SECPRE, Antonio Porcuna, quienes han insistido en que lo aconsejable es pasar por el quirófano en caso de necesidad, tras advertir de que algunas personas se vuelven adictas a esta cirugía.
En general, la intervención estética más demandada en España es la facial (41,6% del total), que integra la de párpados o blefaroplastia (7.262), de nariz o rinoplastia (5.701), otoplastia o de orejas (3.672) y el lifting, entre otras.
En cuanto a intervenciones de forma individual, la más solicitada es la liposucción (20.069 operaciones), seguida del aumento mamario (18.516) y párpados (7.262), nariz (5.701) y abdominoplastia (4.352).
En las intervenciones de mama, un número cinco veces superior de mujeres se las aumenta frente a quienes se las reduce, y se trata de una cirugía casi exclusivamente femenina, mientras que la liposucción es demandada tanto por unas como por otros.
Exceso de sensacionalismo
Los intervinientes han criticado el excesivo "sensacionalismo" de ciertas informaciones en los medios respecto a las adolescentes que se aumentan el pecho, y que se trata de algo "excepcional", han coincidido los tres doctores.
Ciertas noticias sobre algunos padres que regalan a sus hijas un aumento mamario en el caso, por ejemplo, de sacar buenas notas o si aprueban los exámenes, se corresponden con situaciones "muy excepcionales", han insistido los expertos.
Porcuna ha tildado de errónea la actitud de los padres que recompensan así a las adolescentes cuyo cuerpo está aún en fase de desarrollo, y que "banaliza" la cirugía estética, en su opinión, tan "seria" como cualquier otra.
Según el informe, sólo el 22% de las cirugías estéticas se realiza a menores de 29 años, que es el tramo de edad inferior en el que ha sido desglosado el estudio, en donde no se incluyen datos por separado de adolescentes.
Más de 100 millones de euros al año
En cuanto al coste estimado del total de operaciones estéticas realizadas en España (sin incluir honorarios de los profesionales, que son muy dispares), los expertos lo sitúan en 106 millones de euros al año.
Los cirujanos plásticos "retrasamos el reloj, pero no lo paramos", en relación con el envejecimiento del cuerpo, ha advertido Antonio Porcuna, tras coincidir con sus compañeros en que muchas personas se vuelven adictas a la cirugía estética después de una primera intervención que sí pudo estar justificada por motivos psicológicos.
Frente al descenso del 27% del número de cirugías estéticas, un ámbito que representa el 20% de las intervenciones en este sector, dado que el 80% restante se refiere a tratamientos estéticos sin paso por el quirófano, la cifra de rellenos faciales tipo botox ha aumentado.
Así, el número de unidades de toxina botulínica suministrada en España en 2009 fue de entre 75.000 y 80.000; se trata de una opción "más barata en tiempos de vacas flacas", según el presidente de SECPRE.