La comunidad internacional reacciona contra los enfrentamientos postelectorales en Bielorrusia
- Por primera vez Rusia no ha manifestado su apoyo a Lukashenko
- El Parlamento Europea tacha los hechos de "cobardes"
El presidente de Bielorrusia, Alexandr Lukashenko, ha sido reelegido con el 79,67%de los votos, según los resultados oficiales de los comicios del pasado domingo, que, lejos de dejar un nuevo panorama político consolidado, han terminado con violentos choques entre la policía y opositores.
Es más, según han denunciado fuentes de la oposición bielorrusa, siete de los nueve candidatos rivales del presidente de Bielorrusia han sido detenidos por la policía, algo que ha hecho que saltara la alarma internacional.
Luchar por la democracia
Entre los candidatos detenidos se encuentra Nikolái Statskévich, el jefe de su campaña electoral, Serguéi Martsélev. A ello hay que sumarle los anuncios anteriores: el de los candidatos Vladímir Nekliáyev y Andréi Sánnikov.
Nekliáyev, que ha sido brutalmente golpeado por la policía, ha sido secuestrado por desconocidos en el hospital donde había sido ingresado, según ha explicado su esposa a la agencia rusa Interfax.
Según medios digitales bielorrusos, también han sido detenidos Grigori Kostúsev, Ales Mijálevich, Dmitri Uss y Vitali Rimashevski.
Una de las primeras voces que se ha manifestado ante estos hechos es la de el presidente del Parlamento Europeo (PE), Jerzy Buzek, quien ha lamentado el ataque sufrido por el candidato opositor a la presidencia de Bielorrusia Vladímir Nekliáev y lo ha calificado de acto "cobarde" e "inaceptable" para la comunidad internacional y un Estado democrático.
“Los ciudadanos de Bielorrusia merecen un país democrático“
"Este ataque con cobardía a un candidato indefenso a la presidencia de Bielorrusia es indignante y vergonzoso", ha indicado en un comunicado el presidente de la Eurocámara.
Buzek ha querido agregar que "este tipo de comportamiento es inaceptable para la comunidad internacional". y ha asegurado sentirse "impresionado" tras conocer los testimonios recogidos por la prensa sobre el ataque a Nekliáev a manos de las fuerzas de policía.
Por todo ello, el presidente del PE ha pedido a Lukashenko que "impida que las fuerzas policiales realicen tales acciones" y que "castigue" a las personas que estuvieron implicadas en el asalto.
En su opinión, este incidente "arroja la peor luz posible sobre las elecciones presidenciales" celebradas ayer en Bielorrusia.
"Los ciudadanos de Bielorrusia merecen un país democrático", afirmó Buzek y expresó su "profundo respeto por todos aquellos que lucharon de manera pacífica por que eso se hiciese realidad, como Nekliáev".
Esta misma opinión es la que se ha transmitido desde Alemania. El Gobierno ha calificado de "inaceptable" la represión policial contra los manifestantes a través de su ministro de Asuntos Exteriores, Guido Westerwelle, quien se ha mostrado "muy preocupado" en un comunicado que ha hecho público.
"Estoy muy preocupado por las noticias que desde anoche nos llegan desde Minsk. Es inaceptable que se reprima, golpee o detenga a los candidatos opositores y a sus seguidores", ha afirmado el jefe de la diplomacia y vicecanciller alemán.
La validez del proceso electoral
Una de las posturas ante esta situación que más ha sorprendido ha sido la de Rusia que, por primera vez, no ha manifestado su apoyo a Lukashenko. El presidente ruso, Dmitri Medvédev, se ha limitado a expresar su confianza en que Bielorrusia siga el camino de la democracia tras las elecciones presidenciales.
"Esperamos que, como resultado de las elecciones, Bielorrusia prosiga su desarrollo por la senda de un Estado moderno, que se cimenta en la democracia", ha manifestado Medvédev en una rueda de prensa, según las agencias rusas.
Medvédev ha querido subrayar que "para Rusia es importante que los (resultados de los) comicios reflejen la voluntad del pueblo bielorruso".
"Las elecciones en Bielorrusia son un asunto interno de Bielorrusia. Lo que allí ocurre es, al fin y al cabo, un asunto interno de un Estado independiente", ha señalado.
Mientras, sigue preocupando si ha habido o no fraude en el proceso electoral. Por su parte, la misión de observadores de la OSCE en Bielorrusia ha criticado el escrutinio de los votos emitidos durante las elecciones presidenciales del domingo y la detención de candidatos opositores, activistas y periodistas.
"La noche electoral fue enturbiada por la detención de la mayoría de candidatos a la presidencia y centenares de activistas y periodistas", señala el informe presentado en Minsk por la Oficina para Instituciones Democráticas y Derechos Humanos (ODIHR) y la Asamblea Parlamentaria de la OSCE.
Con todo, los observadores occidentales destacaron algunas mejoras en relación a los anteriores comicios presidenciales de marzo de 2006, pero criticaron la falta de transparencia durante el escrutinio.