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La ley Sinde, tumbada en el Congreso

  • La Disposición Final Segunda, que contenía el polémico texto, rechazada
  • Recibe 20 votos en contra, 18 a favor y una abstención
  • Ahora el texto vuelve al Senado, donde podría ser modificado de nuevo

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La Ley Antidescargas pierde los apoyos en el Congreso

Tras sucesivos retrasos en la votación la conocida como ley Sinde, que prevé el cierre de webs, ha sido finalmente tumbada en el Congreso al no contar con el apoyo de ningún grupo parlamentario a excepción del PSOE.

Los socialistas se han quedado solos en la defensa del texto.  No han logrado llegar a un acuerdo con PNV ni CiU, que pedía contrapartidas económicas para sacar adelante la LES en la que se incluía la ley antidescargas.

En una votación que se aplazaba desde las 14:00 a las 21:20,  la Disposición Final Segunda, que es donde se recoge la llamada ley Sinde, era tumbada.

Se ha votado por separado, fuera de la totalidad de la Ley de Economía Sostenible. 20 votos en contra, 18 a favor (los socialistas) y una abstención han hecho que la polémica ley no salga adelante, por el momento.

Algunos diputados han aplaudido tras conocerse el resultado

En lo que estaba siendo un sinfín de votaciones a las enmiendas a la LES, algunos de los integrantes de la comisión de Economía del Congreso han aplaudido este resultado.

Ahora el texto irá al Senado,  donde podrán de nuevo introducir modificaciones. La ley Sinde podría tomar otra forma y volver al Congreso antes de quedar finalmente descartada.

Allí los socialistas tendrán que moverse de nuevo en busca de apoyos ya que en la Cámara Alta, dominada por el PP (123 senadores) el PSOE no es la fuerza mayoritaria (105 senadores).

Los nacionalistas tenían la llave

Todas las miradas han estado puestas durante toda la jornada sobre CiU y PNV. Los nacionalistas eran la pieza clave en esta votación.

El PNV, socio presupuestario del Gobierno, manifestaba por la mañana que iba a pedir una votación separada sobre esa disposición y ya aseguraba que se pronunciarán "negativamente" ante esta disposición "por motivos de forma y de fondo".

Tras plasmarse también el rechazo con CC, una ronda de negociaciones de vértigo ha comenzado con CiU.

Según informaba desde el Congreso la periodista de TVE Mamen del Cerro, CiU ha tratado de llegar a un acuerdo con ciertas contrapartidas  económicas. Al no alcanzarse este consenso los nacionalistas catalanes  han dado la espalda a la LES.

La postura de CiU ha quedado reafirmada en la entrevista al diputado de CiU Josep Sánchez Llibre en la Tarde en 24 horas.   Al ser preguntado directamente sobre si votará contra la Ley Sinde, que  CiU votará en contra del "toda la Ley de Economía Sostenible".

Sánchez Llibre insiste en la Tarde en 24 horas que CiU votará en contra del "conjunto" de la Ley de Economía Sostenible. Añade que en ningún caso se atrasará a mañana la votación y que ya tienen "los cuadernillos de votaciones" listos.

Sin embargo la duda sobre si CiU votaría a favor o en contra se ha mantenido hasta el último momento, pues los rumores de que las negociaciones continuaban se han disparado al moverse la votación hasta el final del Pleno.

Movilización online

Desde que hace ya más de un año viera la luz, la polémica ley se ha enfrentado a un numeroso grupo de internautas y ciudadanos que se manifestaban en "Defensa de los derechos fundamentales en internet".

El texto contemplaba el cierre de páginas webs que vulneraran los derechos de autor, mediante la creación de una Comisión dependiente de Cultura que remitiría las webs denunciadas a los juzgados de lo contencioso administrativo para su clausura.

Facua-Consumidores en Acción enviaba a los grupos parlamentarios 29.755 firmas de usuarios en contra de la regulación en la víspera de la votación del texto en el Congreso.

"Si  es legal, es legal" es el lema del manifiesto que acompaña las firmas.  En él, se pide a los portavoces de la Comisión de Economía del Congreso  que no aprueben "una norma elaborada contra los intereses de los  ciudadanos para favorecer a un poderoso lobby con un modelo de negocio  caduco que no quiere reconvertirse".

Por su parte,  la plataforma RedSos llamaba a los ciudadanos a actuar de forma "urgente". Y para ello facilitaba los teléfonos y e-mails de los diputados que han participado en la votación.

Durante todo el día, la votación ha causado una gran expectación en las redes sociales. #sindegate y #leysinde,  eran los temas más comentados del momento en Twitter, un hervidero de comentarios que se han disparado durante la votación y posterior rechazo a la norma.

La celebración mayoritaria en la Red contrasta con las reacciones de los creadores y las entidades de gestión de derechos.

Antonio Guisasola, presidente de Promusicae ha manifestado su malestar ante este resultado en La noche en 24 horas y ha afirmado que buscarán apoyo internacional para luchar contra la piratería.

Las claves de la ley antidescargas

  • El texto contempla la creación de la Comisión de Propiedad Intelectual dependiente de Cultura que  será la que reciba una denuncia de un autor o particular contra una web  de descargas. En esta Comisión estarán presentes miembros de la  industria cultural.
  • Posteriormente se advertirá al propietario de la página denunciada de que debe retirar los enlaces o contenidos que según la comisión violan la propiedad intelectual.
  • Si la página web no retirara los contenidos considerados ilegales, la Comisión acudirá a los juzgados centrales de lo Contencioso administrativo,  que deberá decidir en un máximo de cuatro días sobre el cierre.
  • En  el proyecto de Ley destaca el siguiente párrafo: "La sección podrá  adoptar las medidas para que se interrumpa la prestación de un servicio  de la sociedad de la información o para retirar los contenidos que  vulneren la propiedad intelectual por parte de un prestador con ánimo de  lucro, directo o indirecto, o de quien pretenda causar un daño patrimonial".
  • Queda  abierta así la interpretación de quién vulnera la propiedad intelectual  ya que entrarían no sólo las webs que se lucren con contenidos  protegidos por la propiedad intelectual sino también aquellas que, aún  no teniendo publicidad "pretendan causar un daño patrimonial".