El Gobierno prepara una gira de altos cargos para despejar las dudas sobre la solvencia española
- Los encargados son el secretario de Estado de Economía y la directora del Tesoro
- La ofensiva es similar a la realizada en febrero del año pasado
El Gobierno lanzará el próximo mes una nueva ofensiva para ganarse la confianza de los mercados y despejar las dudas sobre la solvencia de la deuda española ante las presiones surgidas por el eventual rescate a Portugal. Como parte de esa operación, el secretario de Estado de Economía, José Manuel Campa, y la directora general del Tesoro, Soledad Núñez, iniciarán en febrero una gira que les llevará a las principales plazas económicas europeas, estadounidenses y asiáticas, según Europa Press.
Fuentes del Ministerio de Economía y Hacienda han rebajado en declaraciones a Efe la importancia de esas visitas, ya que aseguran que a comienzos de cada año, aproximadamente en febrero, se dan a conocer a los inversores las emisiones previstas por el Tesoro Público y este año, previsiblemente, se seguirá la tradición.
La primera fase de esa gira se centrará en Europa, previsiblemente en Londres y París, en un intento por conjurar las dudas sobre la deuda española que, tras el rescate a Grecia e Irlanda y los rumores sobre Portugal, está sometida a fuertes presiones en los mercados, donde esta semana la prima de riesgo ha vuelto a escalar por encima de los 270 puntos básicos.
Posteriormente, está previsto que Campa y Núñez viajen a Estados Unidos y Asia, después de que China haya manifestado su intención de seguir comprando deuda pública española.
Un contexto mucho peor al del año pasado
La gira de este año será similar a la realizada el año pasado por el Gobierno que, también en el mes de febrero, llevó a la vicepresidenta económica y a Campa a viajar a Londres y París, después de que algunos organismos y medios de comunicación británicos lanzaran diversas advertencias sobre la fragilidad de la economía española.
Después, Campa viajó a Estados Unidos (visitó las plazas financieras de Nueva York y Boston) donde se reunió con bancos de inversión y fondos de riesgo (hedge funds), mientras que Núñez se desplazó a Asia para explicar la estrategia de la deuda española a los inversores de aquel continente.
Sin embargo, el contexto de la gira de este año dista mucho de las circunstancias de 2010. En el último año, la crisis de deuda de los llamados países periféricos de la Zona euro se ha recrudecido, lo que ha llevado no sólo a un incremento de las primas de riesgo, sino al rescate de Grecia e Irlanda.
Ahora la espada de Damocles pende sobre Portugal y algunos analistas sitúan a España como la siguiente pieza que se cobrará la desconfianza de los mercados.
Las emisiones de deuda como prueba de fuego
Por el momento, España se someterá al escrutinio de los mercados en una emisión de bonos a cinco años, que se celebra este jueves y en la que el Tesoro espera colocar hasta 3.000 millones de euros.
Después será el turno de otras tres subastas más: el 18 de enero (letras a 12 y 18 meses), el 20 (obligaciones a 10 años) y el 25 (letras a 3 y 6 meses).
Para el conjunto de 2011, el Tesoro Público espera realizar emisiones netas por valor de 47.200 millones de euros -un 24% menos que en 2010- para cubrir sus necesidades financieras efectivas.
Estas necesidades se corresponden con la suma del déficit de caja del Estado para 2011 (44.036 millones) con los 3.588 millones del pago derivado del préstamo a Grecia en 2011. A esa cifra se debe restar la variación de activos financieros prevista para el ejercicio (410 millones). Así, la ayuda a Grecia supondrá un 7,6% del total de las necesidades de financiación.
El organismo cubrirá estas necesidades con subastas de instrumentos a medio y largo plazo (bonos y obligaciones) por un valor bruto de 93.800 millones (47.200 millones en neto), ya que el importe de las emisiones de letras igualará a las amortizaciones y dará como resultado una emisión neta nula de este tipo de instrumento.