Enlaces accesibilidad

Hallazgos en gusanos para tratar el cáncer de piel

  • Se abren nuevas líneas de estudio para luchar contra cánceres cutáneos
  • Puede ayudar a prevenir enfermedades parasitarias en países en desarrollo

Por

Cuando un animal envejece, la calidad de su piel empeora de manera drástica. Pero, hasta la fecha, la comunidad científica no conoce los mecanismos que empeoran el envejecimiento cutáneo.

Ahora, una investigación internacional ha descubierto uno de los mecanismos implicados en la renovación de la cutícula del gusano Caenorhabditis elegans, lo que abre nuevas líneas de estudio en el campo de la lucha contra el envejecimiento de la piel en humanos y en la curación y cicatrización de las heridas.

Este trabajo, publicado en la revista PNAS, podría ayudar al tratamiento de cánceres cutáneos y al desarrollo de enfermedades parasitarias provocadas por nematodos (un tipo de gusano como los del estudio) muy extendidas en los países en vías de desarrollo.

El envejecimiento en los seres vivos se produce porque las células pierden su capacidad para reparar el daño oxidativo que acumulan a lo largo de su vida.

El estudio constata que el 'proceso de muda' en este gusano está asociado a cambios en el estado de oxidación de proteínas presentes en su cutícula. Al bloquearse la actividad de estas proteínas, la cutícula vieja no se debilita lo suficiente para que el animal la rompa, y acaba muriendo en su interior.

Sin embargo, como detalla el CSIC en un comunicado, al aplicar glutatión -una molécula común en todos los organismos vivos que regula el equilibrio de la oxidación celular- favorece la muda y ayuda al gusano a degradar la vieja cutícula y separarse de ella.

Por el momento los resultados sólo se han demostrado en estos gusanos, pero podrían servir de base para la investigación de la renovación de la piel humana y de otros animales, así como en el tratamiento de cánceres cutáneos y otras afecciones de la piel.

"Dado que ni humanos, ni animales, ni plantas tenemos un proceso de muda como tal, si descubrimos qué proteínas de la cutícula están implicadas en los procesos de oxidación, podríamos dar con nuevas vías para tratar estas enfermedades", explica el investigador del CSIC Antonio Miranda-Vizuete.