Un acuerdo pone fin a la crisis del gas en Chile que ha atrapado a miles de turistas

• Miles de turistas denuncian estar "secuestrados" en la región de Magallanes
• Los disturbios entre manifestantes y Policía han dejado dos muertos
• Los manifestantes protestaban por la subida del precio del gas

Los manifestantes protestan contra la subida del gas en la región chilena de Magallanes.

La decisión de la Empresa Nacional del Petróleo (Enap), de incrementar a partir del 1 de febrero un 16,8% el precio del gas a los usuarios de Magallanes, la región más fría y aislada del sur de Chile, ha provocado violentos disturbios entre manifestantes y Policía que dejan dos muertos y, además, han afectado a miles de turistas.

El conflicto llega este martes a su fin después de que el Gobierno chileno haya llegado a un acuerdo con la Asamblea Ciudadana de Magallanes que incluye la entrega de 15.000 subsidios para el pago del gas a familias con un consumo de hasta mil metros cúbicos mensuales de gas, cuyo precio subirá un 3% y se mantendrá ocho meses, hasta que se apruebe una ley que establezca un sistema permanente respecto del precio.

El gas es el principal combustible de Magallanes, única región de Chile donde se produce y se entrega subsidiado a sus habitantes, que por la lejanía y aislamiento en que viven afrontan un coste de la vida al menos un tercio más caro que en el resto de Chile.

Los habitantes de Magallanes, una de las zonas más frías del planeta, llevan una semana protestando con dureza al considerar que esta medida les afectaría de forma injusta ya que para ellos el gas es una materia básica para calentar sus hogares, sus vehículos y sus fábricas.

Por esta razón, un grupo de manifestantes ha bloqueado las carreteras de la región más austral del planeta, convirtiendo a miles de turistas en "rehenes". Algunos, tratando de escapar de las revueltas sociales a toda costa, se han dado largas caminatas a pie para llegar al aeropuerto.

Caminata a pie para llegar al aeropuerto

Los turistas, la mayoría procedente de Argentina, Europa y América del Norte, se han echado al equipaje a cuestas y han recorrido decenas de kilómetros para llegar al aeropuerto de Punta Arenas.

Es el caso de Paul Sullivan, un mochilero de la ciudad británica de Devon de 22 años, que ha tenido que caminar 15 kilómetros y pasar cinco controles de piquetes para llegar al aeródromo. Sin embargo, tiene un buen recuerdo de los lugareños.

"Ellos fueron muy amables y me dieron un poco de café y manzanas para el camino", relata Sullivan al diario The Guardian.

Pero este no es la opinión generalizada entre los cientos de turistas que se han quedado varados y que han realizado sus propias manifestaciones para quejarse de la falta de alimentos, dinero y sobre todo paciencia. "Secuestrados", en todos los idiomas, es la palabra que, según ellos, mejor describe su situación, ya que el propio Sullivan ha reconocido que los residentes están utilizando a algunos turistas como moneda de cambio.

El Ejército evacúa a los turistas

La Cruz Roja ha establecido un refugio en una escuela para los turistas que se han quedado sin dinero.

Al drama de los que tratan de llegar al aeropuerto se suma el de los que acaban de llegar a Punta Arenas sin saber que había una general y se encuentran con que nos saben cómo van a llegar a la ciudad o a su destino.

Además, las condiciones climatológicas no acompañan. Los hoteles están llenos de turistas que no son tan valientes como Sullivan y se niegan a hacer largas caminatas con el temporal de frío y viento propio de la región de Magallanes.

Algunos deciden tomárselo más a la ligera y, entre bromas, recuerdan que esta semana se cumple el 100º aniversario de la expedición del capitán Scott a la Antártida.

El Ejército ha evacuado a un grupo grande de Puerto Natales por aire, pero muchos otros siguen atrapados en el parque nacional Torres del Paine.

"Los turistas no pueden salir de aquí de otra manera que no sea caminando hasta la frontera con Argentina y el punto más cercano está a 35 kilometros de distancia, y acaba en medio de la nada", ha señalado un visitante, Lee Schmidtchen, a través de correo electrónico.

Dos muertos en las protestas

El director de Turismo ha señalado que la región de Magallanes había perdido más de 4 millones de dólares en esta última semana y que estos incidentes han dañado seriamente su reputación.

El conflicto estalló cuando el gobierno del presidente Sebastián Piñera anunció un aumento del 17% en el precio del gas natural como parte de un plan para hacer frente al déficit energético de Chile y una reducción de los subsidios pagados por la Enap.

Las protestas se han radicalizado después de que un camionero que ya ha sido identificado embistiera a una barricada e hiriera de muerte a dos mujeres.

Piñera, que afronta su peor crisis desde que 33 mineros quedaran atrapados el año pasado, ha confiado la cartera de Energía al héroe del rescate, el popular ministro de Minería, Laurence Golborne, para que obre su magia otra vez.

Golborne ha viajado hasta Punta Arenas para tratar de desactivar una crisis que, según los analistas, podría ser políticamente mucho más difícil que el rescate de los 33 mineros chilenos que dio la vuelta al mundo.

Por el momento, ya ha conseguido llegar a un acuerdo con la Asamblea Ciudadana de Magallanes y las partes negociadoras redactan ahora el documento con los acuerdos que permitirán finalizar de inmediato el paro mantenido durante siete días en la zona, a unos 2.300 kilómetros al sur de Santiago

"Se está firmando el acuerdo en Puntas Arenas. Grande Magallanes, hemos hecho historia, somos un ejemplo. Termina una movilización regional", escribió en su cuenta Twitter el diputado independiente por la zona Miodrag Marinovich, de activa participación en las manifestaciones cívicas.