Trabajo niega que se haya hablado del cierre de Garoña en la negociación sobre las pensiones
- Valeriano Gómez ha descartado "un cambio de cromos" en el proceso
- Los sindicatos creen "un disparate" vincular las nucleares con las pensiones
El ministro de Trabajo, Valeriano Gómez, ha negado que en la mesa de negociación de las pensiones se haya planteado el retraso del cierre de Garoña u otra central nuclear.
Gómez ha negado "un cambio de cromos" y ha dejado claro que "en ningún momento, se ha planteado nada que tenga que ver con el cierre o la reapertura de una central nuclear".
El titular de Trabajo ha insistido en que se trata de "asuntos que tienen valor por si mismos y son complicados, y no tiene sentido complicarlos más, mezclándolos".
"Como coordinador de las negociaciones debo decir que evidentemente es absurdo plantear, ni siquiera imaginar la posibilidad de hacer reformas en pensiones que sean intercambiables con la política energética o industrial", señala Gómez.
Acuerdo global
Dicho esto, Gómez no negó que Gobierno y agentes sociales "discutirán de todas estas políticas", ya introducidas en las últimas reuniones, "pero sabiendo bien que tienen un valor en sí mismas".
Fuentes del Ejecutivo filtraron el miércoles que el Gobierno podría posponer el cierre de la central nuclear de Garoña para mantener los puestos de trabajo, a cambio de un acuerdo global sobre las pensiones y la reforma laboral.
Según Gómez, "este tipo de situaciones son comprensibles", pero considera que tiene que imperar "el sentido común". Del mismo modo, responde a las declaraciones del secretario general de CC.OO., Ignacio Fernández Toxo, quien ha apuntado que alguien del Gobierno podría estar obstaculizando un acuerdo, argumentando que el Ejecutivo es el primer interesado en lograr un pacto.
Los líderes de los sindicatos UGT y Comisiones Obreras también han considerado "un disparate" vincular asuntos tan dispares como el futuro de la energía nuclear y la reforma de las pensiones.