Charles de Coulomb y la balanza de torsión

• Contribuyó a la utilización de cálculos precisos en el área de ingeniería
• Utilizó hebras de diversos materiales para perfeccionar la balanza de torsión
• En su honor la unidad de carga eléctrica ha recibido el nombre de culombio

A hombros de gigantes

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El físico francés Charles Augustin de Coulomb nació en Angulema el 14 de junio de 1736, en el seno de una familia influyente y adinerada que se arruinó por culpa de unas especulaciones financieras, lo que provocó la separación del matrimonio.

Después de vivir un tiempo en París y en Montepellier, el joven Charles se matriculó en la prestigiosa Escuela de Ingeniería de Meziers. Con 25 años se graduó como ingeniero, con rango de teniente.

Entre 1764 y 1772 estuvo destinado en la isla Martinica, donde supervisó la construcción del 'Fuerte Borbón'. Un trabajo que le dio la oportunidad de realizar incontables experimentos sobre mecánica de estructuras, fricción en máquinas y elasticidad de materiales. Sin embargo, durante su estancia en el Caribe contrajo enfermedades que le acompañarían el resto de su vida.

A su regreso a Francia, comenzó a escribir sobre mecánica aplicada. Su primera obra 'Una aplicación de reglas, de máximos y mínimos para algunos problemas de estática, relativos a la arquitectura' contribuyó a la utilización de cálculos precisos en el área de ingeniería.

En 1777 ganó el Gran Premio de la Academia de Ciencias francesas con un trabajo sobre la brújula y el magnetismo terrestre. Cuatro años más tarde volvería a hacerse con el galardón gracias a su teoría de la fricción en las máquinas simples. Además, consiguió un puesto permanente en esa institución dedicándose exclusivamente a la Física.

La balanza de torsión

En uno de sus trabajos más famosos, Coulomb utilizó hebras de diversos materiales para perfeccionar la balanza de torsión. Este instrumento consiste en una barra que cuelga de una fibra que es capaz de retorcerse. Si la barra gira, la fibra tiende a llevarla a su posición original. Si se conoce la fuerza de torsión que la fibra ejerce sobre la barra, se logra un método muy sensible para medir fuerzas.

Gracias a esta balanza, formuló la ley que lleva su nombre, que dice que dos cargas puntuales del mismo o distinto signo se repelen o se atraen con una fuerza directamente proporcional al producto de la magnitud de ambas cargas e inversamente proporcional al cuadrado de la distancia que las separa. Principio que guarda gran semejanza con la Ley de la Gravedad de Newton.

Durante 25 años, presentó 25 artículos a la Academia sobre electricidad, magnetismo, torsión y aplicaciones de la balanza de torsión, y participó en 310 Comités de esta institución. Al mismo tiempo continuó prestando asesorías en proyectos de ingeniería, se involucró en un proyecto de canal en Bretaña, realizó proyectos de regadío y de fuentes de agua, e incluso de reformas en el sistema de hospitales.

La Revolución Francesa, en 1789, provocó la disolución de la Academia de Ciencia, para dar origen al Instituto de Francia. Coulomb también se jubiló del Ejército y se retiró a su casa en Blois, para continuar con sus investigaciones en magnetismo, rozamiento y electricidad.

Unificación de pesos y medidas

Después de la Revolución, ayudó al nuevo gobierno en la planificación de un sistema métrico decimal de pesos y medidas, y en 1801 asumió la presidencia del Instituto de Francia. En 1802 se casó con Louise Françoise LeProust, con quien había tenido dos hijos ilegítimos. Ese mismo año se encargó de la organización y control del nuevo sistema de comunicaciones y desempeñó el cargo de inspector de educación.

Coulomb falleció en París el 23 de agosto de 1806, a los 69 años de edad. Entre sus obras destacan 'Teoría de las máquinas simples' y 'Sobre la electricidad y el magnetismo'.

En su honor la unidad de carga eléctrica ha recibido el nombre de culombio, que se define como la cantidad de carga transportada en un segundo por una corriente de un amperio

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