La confianza de los consumidores sube 6 puntos en enero, por la mejor percepción actual
- Mejora la percepción por la situación actual y las expectativas de los próximos meses
- La economía del hogar mantiene los mayores niveles de confianza
El ICC-ICO
El ICC-ICO, y sus dos componentes de situación actual y expectativas, pueden tomar valores que oscilan entre 0 y 200; una lectura por encima de 100 indica una percepción favorable/optimista de los consumidores acerca de las preguntas planteadas y por debajo de 100 una percepción negativa/pesimista.
La confianza de los consumidores subió en enero 6,1 puntos, con lo que volvió al nivel del pasado noviembre, como consecuencia de la mejor percepción de la actual situación económica, así como de las expectativas para los próximos seis meses.
El Indicador de Confianza del Consumidor (ICC), que elabora el Instituto de Crédito Oficial (ICO), se situó en enero en 70,7 puntos, frente a los 64,6 del mes anterior, aunque está por debajo de los 78,7 que marcaba en enero de 2010.
Los componentes del indicador que más suben son los referidos a la economía general del país, lo que el ICO explica en la corrección de la reacción excesiva de los consumidores en diciembre por las presiones sufridas por la deuda española en los mercados internacionales.
Se corrige la "sobrereacción"
Este repunte de la confianza de los consumidores en el último mes del año contrasta con la caída de 5,4 puntos que experimentó el pasado mes de diciembre, por lo que el ICO considera que los consumidores pueden haber corregido una "cierta sobrerreacción" mostrada en momentos de mucha exposición a noticias sobre la economía española y las tensiones en los mercados financieros.
El Instituto sostiene que quizá por esta razón los componentes que más han subieron en enero fueron los referidos a la economía nacional, tanto en su situación actual como en las expectativas. Las perspectivas sobre la economía del hogar mantienen los valores más elevados, mientras que los componentes del empleo son los que menos suben por el carácter retrasado que suelen tener los indicadores del mercado laboral.
Así, el Indicador de Confianza del Consumidor (ICC) mejoró en enero respecto al mes anterior debido al avance del indicador parcial de la situación actual, que subió 6 puntos, y al aumento del indicador de expectativas en 6,3 puntos.
Respecto a enero de 2010, el Indicador de Confianza del Consumidor se situó 8 por debajo del nivel de hace un año, motivado por el descenso en 1,2 puntos del indicador de situación actual y de la caída en 14,7 puntos del indicador de expectativas.
Mejora la percepción del empleo
La mejora de 6 puntos del indicador parcial de situación actual experimentado en enero fue consecuencia de la mejor opinión de los consumidores sobre la evolución reciente de la economía española (-6,8 puntos), la economía del hogar (5,7 puntos) y el empleo (5,4 puntos). Este mes la mejor valoración sigue siendo la de la economía doméstica.
Si se compara con el mismo mes de 2010, el indicador parcial de situación actual ha bajado 1,2 puntos porque la peor valoración de la economía del país (-3,9 puntos) y del hogar (-2,1 puntos) se compensó parcialmente con una mejor percepción del mercado de trabajo (+2,3 puntos).
Por su parte, el indicador parcial de expectativas aumentó 6,3 puntos en enero respecto a diciembre, hasta situarse en 93,8 puntos. Esta evolución se explica por las mejores expectativas sobre la economía española (7,4 puntos), la economía doméstica (6,1 puntos) y el mercado laboral (5,2 puntos). El componente de la economía familiar es el mejor valorado por los encuestados.
En tasa interanual, el indicador de expectativas se encuentra 14,7 por debajo de su valor de enero de 2010 puntos como resultado de la visión más negativa de los consumidores acerca de la economía española, el empleo y la economía familiar.
Por otro lado, en enero los consumidores han disminuido sus expectativas de inflación, si bien se han incrementado las perspectivas sobre un aumento de los tipos de interés. También han mostrado mejores expectativas acerca de sus posibilidades de ahorro y de compra de bienes de consumo duradero que en el mes de diciembre.
Al comparar con un año antes, los encuestados manifiestan unas mayores expectativas inflacionistas y de subida de tipos de interés, mientras que sus perspectivas sobre su capacidad de ahorro y de posibilidades de compra de bienes de consumo duradero han empeorado.
El ICO enmarca estas mayores expectativas inflacionistas en un contexto de incremento de los precios del petróleo y de anuncios de subidas de precios regulado, lo que unido a su estado de ánimo general, han mermado las expectativas de ahorro de los consumidores y, en menor medida, las de adquisición de bienes de consumo duradero.