'El País' veta a Nacho Vigalondo por un comentario sobre el Holocausto en Twitter
- El diario de PRISA cancela la campaña que protagonizaba el director de cine
- Considera "inaceptables" los comentarios de Vigalondo en su Twitter
- Vigalondo ha pedido perdón, pero asegura que el incidente fue una parodia
El 30 de octubre de 1938, Orson Welles provocó el pánico en Nueva York y Nueva Jersey al emitir en la radio una dramatización de La guerra de los mundos, de H.G.Wells.
A pesar de explicar al comienzo de la emisión de la CBS que se trataba de una ficción, muchos de quienes se incorporaron más tarde a ella creyeron que se trataba de un noticiero y que, en efecto, los extraterrestres estaban invadiendo la Tierra. El hecho produjo una oleada de indignación en la opinión pública en los días siguientes y Orson Welles tuvo que pedir perdón por la broma, aunque le dio la fama.
El 28 de enero de 2011, el director de cine Nacho Vigalondo, escribió en su cuenta de Twitter: "Ahora que tengo más de cincuenta mil followers y me he tomado cuatro vinos podré decir mi mensaje: ¡El holocausto fue un montaje!". Poco después, añadía: "Tengo algo más que contaros. La bala mágica que mató a Kennedy ¡Todavía no ha aterrizado!".
Ambos comentarios -y otros subsiguientes, que mezclan títulos de películas de Spielberg y humor negro antisemita- provocaron el pánico y la polémica en la Red desde entonces en Twitter y en medios online... y el despido del cineasta de El País, que ha cancelado la campaña publicitaria del diario que protagoniza Vigalondo.
El diario considera "inaceptables e incompatibles con su línea editorial los comentarios vertidos por el realizador", aunque recuerda que los hizo "en un soporte ajeno a EL PAÍS". Además, señala que "Vigalondo ha comunicado su decisión de cerrar el blog Diario Cinematográfico que tenía alojado" en ELPAÍS.com.
El director de Los cronocrímenes explicó en el ahora cancelado blog que el citado comentario nacía de la intención de hacer "diferentes versiones de un mismo gag: Imaginemos que yo fuese un villano de opereta con un plan maléfico, consistente en acaparar followers con excusas falsas (una carrera como cineasta) y, cuando acumulase un número lo suficientemente alto, sembrar el caos con mensajes devastadores".
"La idea era twittear un puñado de esas revelaciones, pero sólo me quedé en dos... (...) La conversación se desvió porque el primer mensaje había acaparado demasiado protagonismo", señalaba tres días después del tweet que desató la polémica.
En el último post del blog, Vigalondo asegura que "el tweet que ha levantado la polvareda no es la declaración de un revisionista, es la parodia de una actitud así".
Según el comunicado publicado en su web, El País asegura que decidió "retirar" la campaña de publicidad protagonizada por Nacho Vigalondo "el sábado a mediodía, nada más tener conocimiento de los citados comentarios".
"Los anuncios que aparecieron posteriormente en algunas televisiones y los que aparecerán en revistas en los próximos días no pudieron ser anulados por razones técnicas", apostilla el diario de PRISA, que concluye señalando que es Vigalondo el que "ha comunicado su decisión de cerrar el blog Diario Cinematográfico que tenía alojado en la edición digital de EL PAÍS".
“Pido disculpas por el dolor que está causando mi tweet, asegura Vigalondo“
Vigalondo se ha despedido en su blog y ha pedido "disculpas por el dolor que está causando mi tweet", aclarando que "ni soy antisemita ni negacionista" y reconociendo que "a raíz de todo lo que ha pasado desde el pasado viernes", la suspensión del blog "puede ser una medida consecuente".
Una reflexión sobre Twitter como fuente
El propio director trataba el martes 1 de febrero de dar una explicación de la "fuerza que está impulsando" lo que él consideraba "este desaguisado".
Consideraba dos circunstancias: "La proximidad de la dimisión de Álex de la Iglesia de la Academia de Cine a través de su cuenta de Twitter. Dicho de un modo más preciso: La constatación de Twitter como una herramienta de producción de noticias. Lo hemos estado viendo durante toda la última semana: Titulares y cuerpos de noticia compuestos casi enteramente por twitters entrecomillados."
"Podríamos debatir si es legítimo darle a un twitteo valor de declaración en firme, cuando hablamos de un formato que se nutre principalmente de la instantaneidad. También podemos debatir cuánta vigencia informativa conserva un twitteo más allá del contexto en el que nace, una conversación cruzada que el periodista no se va a molestar en recomponer...", continuaba el cineasta.
No se sabe todavía si esto le dara tanta fama a Nacho Vigalondo como a Welles, pero de momento se ha convertido en trending topic (tema del momento) de Twitter en España a través de su apellido y del hagstag #humorelpais.
Como ha recordado Vigalondo estos días, el guión del remake de sus Cronocrímenes en Estados Unidos correrá a cargo del guionista de La lista de Schindler. Alguno pensará que todo es un plan preconcebido para dar publicidad al proyecto. ¿Lo es?