Enlaces accesibilidad

Secuencian por primera vez el genoma de un crustáceo: la pulga de agua

  • Es la primera vez que se secuencia el genoma de un crustáceo
  • Lo han secuenciado investigadores de la Universidad de Indiana, EE.UU.

Están saturados de genes, tienen más que cualquier otra secuencia conocida

  •    

Por
La pulga de agua, el primer crustáceo del que se secuencia su ADN
La pulga de agua, el primer crustáceo del que se secuencia su ADN

La pulga de agua (Daphnia pulex), un diminuto pariente de agua dulce de las gambas, se ha convertido en el primer crustáceo del que se secuencia su genoma.

Según el equipo de científicos (de la Universidad de Indiana, EE.UU.) que ha logrado su secuencia, estos organismos están saturados de genes, ya que tienen más que cualquier otra secuencia conocida, como recoge la revista Science.

Este pequeño crustáceo tiene más genes identificados que ningún animal, unos 31.000, incluidos los seres humanos, que tienen 23.000. Un tercio de estos genes son completamente nuevos para la ciencia.

El gran número de genes identificados se debe a que algunos están duplicados, lo que podría jugar un papel fundamental en la habilidad de Daphnia para adaptarse a entornos cambiantes.

Otra de las grandes ventajas de estos las D. pulex, como ha explicado John Colbourne (director del trabajo) es que tienen relativamente poco ADN no codificante, la cadena de ADN que no contiene información para hacer una proteína.

Organismos claves de la cadena

La pulga de agua es una especie clave en las cadenas de alimentación de agua dulce y su biologís se presta muy bien a la experimentación científica. Son transparentes, tienen un ciclo de vida corto, pueden clonarse con facilidad y reaccionan con rapidez a los cambios ambientales.

Por ejemplo, en respuesta a componentes químicos de depredadores producen características fuera de lo común como espinas en la cola y pinchos en el cuello.

Además, se adaptan a un amplio rango de acidez, toxina, concentraciones de oxígeno y demás factores como puede ser la temperatura o la calidad del alimento.

Los autores señalan que esperan que la secuenciación de este genoma conduzca a un mejor conocimiento de cómo los organismo, en particular los que viven en agua dulce, responden a los cambios ambientales