Salgado apoya que los salarios suban con el IPC porque hay "flexibilidad" cuando es necesario

• La ministra dice que esa flexibilidad estará también en la negociación colectiva
• Cree que la previsión de 20.000 millones para recapitalizar las cajas no es corta

La vicepresidenta segunda y ministra de Economía, Elena Salgado, cree que "seguirá existiendo" la cláusula por la que los salarios suben con el IPC, criticada por Alemania, y no teme a sus efectos porque ya "se ha demostrado" que en España hay "flexibilidad" en estas materias cuando es necesario en momentos de crisis.

Salgado, en una entrevista en RNE, se ha pronunciado así respecto a la defensa que el Ministerio de Trabajo y los agentes sociales han hecho de que los salarios se liguen al IPC y no a la productividad, como defiende la canciller alemana, Angela Merkel. En este sentido, ha considerado que "no es imprescindible" que los salarios se desvinculen del IPC.

Según la ministra, en España ya se han dado muestras de esa flexibilidad modificando salarios y horas de trabajo por acuerdo entre empresarios y sindicatos y ha señalado que esa "flexibilidad" ya se ha recogido en la reforma del mercado laboral y "estará" en la negociación colectiva.

Sobre el mal dato del paro en enero, cuando subió en casi 131.000 personas, Salgado ha insistido en las tesis del Ejecutivo de que se trata de un dato de "mucha estacionalidad" y ha defendido que el crecimiento económico "se va consolidando" y que en la segunda mitad del año España "será capaz de crear empleo neto".

Respecto a las necesidades de recapitalización de las cajas de ahorro, la ministra cree que la previsión del Gobierno de 20.000 millones de euros "no se va a quedar corta" y ha confiado en que obtengan el capital íntegro a través del capital privado, "mejor a través de la salida a bolsa", y cuando llegue septiembre el Gobierno inyectará el capital que no hayan podido incorporar.

La vicepresidenta segunda también ha expresado su adhesión al pacto para la competitividad de la eurozona, como ha hecho el presidente José Luis Rodríguez Zapatero, y ha destacado la necesidad de defender la estabilidad del euro.