¿Por qué salen los ojos rojos en las fotos?
- ¿Tienes dudas sobre la ciencia cotidiana que nos rodea?
- Envía tu pregunta o tus vídeos y fotos sobre experimentos caseros
Quién no ha salido alguna vez en una fotografía con los ojos rojos como un demonio. Son un fastidio. La intención de la instantánea es inmortalizar un momento bonito y tras el disparo compruebas que tus amigos o familia dan más miedo que otra cosa.
Para ver, necesitamos luz. Esta entra hasta el fondo del ojo y choca con la retina, que está llena de células fotosensibles que transforman este estímulo en impulsos nerviosos. Estos llegan a nuestro cerebro que los interpreta y es entonces cuando somos conscientes de la imagen que tenemos delante. En definitiva, vemos.
El color rojo de los ojos es el efecto del reflejo de la luz en los vasos sanguíneos que irrigan la retina. Suele ocurrir cuando se dispara con flash en ambientes oscuros.
En estas condiciones de luz tenue, la pupila está muy abierta para que entre hasta el fondo la poca luz que hay. El repentino chorro de luz del flash pilla por sorpresa al órgano que no cierra la pupila a tiempo.
Los ojos azules sufren este efecto mucho más a menudo que los oscuros.
Esto es así porque los ojos oscuros tienen más pigmentos al fondo que absorben la luz y atenúan el reflejo.
“El flash parpadea un par de veces para que el ojo se adapte“
Para evitarlo, “las cámaras compactas suelen tener una opción para evitar los ojos rojos”, explica el fotógrafo Rai Robledo. “Para ello, el flash parpadea un par de veces antes de lanzar el fogonazo grande y así el ojo se adapta a un ambiente con más luz y contrae la pupila”.
También se puede evitar con un flash externo. “Si la cámara tiene un flash elevado unos 10 centímetros sobre objetivo no suele haber problema de ojo rojo porque el chorro de luz no incide frontalmente”, apunta.
Muchos otros vertebrados también salen con los ojos ‘demoniacos’ en la fotos. Pero el color del reflejo de sus ojos no se limita al rojo. Su gama de colores es mucho más amplia, desde verde o amarillo a azul, rosa y blanco.
En el caso de los animales el motivo del reflejo de sus ojos no es el mismo que en los humanos. Ellos tienen una capa reflectora en el fondo de los ojos, justo detrás de la retina que se llama ‘tapetum’. Sirve para mejorar su visión nocturna.
“El 'tapetum' les sirve a algunos animales para mejorar la visión nocturna“
Lo consigue haciendo que la luz pase dos veces por la retina. La luz procedente del exterior pasa por la retina, se refleja en esta capa, y vuelve a pasar por la retina en sentido opuesto. Así, los fotorreceptores de la retina tienen el doble de posibilidades de ser estimulados.
El color del ‘tapetum’ depende del animal y del color de su piel. Por ejemplo, los perros negros verde, un cocker canela lo tiene amarillo y un caballo marrón lo tiene azul… Los animales que no tienen el ‘tapetum’ pigmentado exhiben un reflejo de color rojo, como nosostros.
Es el caso de los huskies siberianos de ojos azules o los gatos siameses.