EE.UU. invertirá 38.800 millones de euros para construir en 6 años su red de tren de alta velocidad
- El año que viene, la inversión alcanzará los 5.800 millones de euros
- Prevén crear empleos estables y especializados, e impulsar el sector ferroviario
Más de 38.800 millones de euros en seis años (53.000 millones de dólares). Eso es lo que invertirá Estados Unidos para construir su red nacional de ferrocarril de alta velocidad, según ha anunciado este martes el vicepresidente de Estados Unidos, Joe Biden.
En un acto con el secretario de Transportes, Ray LaHood, Biden ha defendido esta propuesta -enmarcada en el plan Build presentado por el presidente Barack Obama- porque posicionará el tren de alta velocidad en "igualdad de condiciones" con otros programas de transporte y revitalizará la industria manufacturera del sector ferroviario del país.
"Como dijo el presidente Obama en el debate sobre el Estado de la Unión, hay áreas claves en las que no nos podemos permitir sacrificios como nación, y una de ellas son las infraestructuras", ha remarcado el vicepresidente.
Biden ha asegurado que entiende la necesidad de invertir en un sistema ferroviario moderno, que ayude a conectar comunidades, reducir la congestión y crear empleos de calidad y especializados que no pueden ser externalizados. "Este plan nos ayudará a hacerlo, al mismo tiempo que incrementamos el acceso al ferrocarril de alta velocidad a más americanos", ha asegurado Biden.
En esta línea, ha añadido que la inversión de 8.000 millones de dólares (5.866 millones de euros) en el tren de alta velocidad propuesta por Obama para el próximo año ayudará a revitalizar la industria nacional ferroviaria e impulsará la innovación y la creación de empleo, ya que conectará los mayores centros de población. Así, esta previsto que se creen decenas de miles de empleos de clase media en la construcción, la fabricación y el transporte ferroviario.
Ray LaHood y varios de sus colaboradores en el Departamento de Transportes ha visitado en varias ocasiones España para analizar el sistema de alta velocidad de este país. Además, las empresas españolas de sector de infraestructuras confían en poder participar en la construcción de la red estadounidense.