El Gobierno catalán ve "difícil" recortar los gastos de la Generalitat por encima del 12%

• El conseller de Interior catalán pide a Zapatero que reduzca más Ministerios
• "Cataluña y el resto de España están entrando en una nueva etapa", dice Puig

El conseller de Interior, Felip Puig, en el Parlamento catalán.

El conseller de Interior, Felip Puig,  ha asegurado este jueves que "será difícil" que la Generalitat pueda recortar sus gastos por encima del 12%, como pidió el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, al presidente catalán, Artur Mas.

En esa reunión, el presidente de la Generalitat de Cataluña, Artur Mas, anunció que el Gobierno aprobó operaciones de endeudamiento a largo plazo para la comunidad y que se desbloquearían las inversiones pendientes en infraestructuras, que alcanzan los 759 millones de euros.

La primera de las decisiones levantó ampollas entre el resto de CC. AA. Por eso este miércoles, Elena Salgado, vicepresidenta segunda del Ejecutivo y ministra de Economía, insistió en que el Gobierno no ha rectificado su política en este asunto y recordó, en este sentido, que "las 17 Comunidades Autónomas  solicitaron refinanciar su deuda en 2010 y las 17 recibieron la  autorización".

Cataluña pide austeridad a España

Puig ha pedido al Gobierno que aplique las mismas medidas de austeridad que Zapatero pide ahora a Cataluña: "Esperamos que haya corresponsabilidad, porque hay ministerios que en los últimos años se han vaciado de competencias pero no ha variado el número de funcionarios", ha manifestado.

En declaraciones a Catalunya Ràdio, el titular de Interior ha reprochado al Gobierno que no haya reducido el número de Ministerios,  como sí ha hecho la Generalitat con las conselleries.

"Tenemos que hacer un esfuerzo de contención, austeridad y rigor", ha subrayado el conseller, que ha destacado que es importante "no plantear una solución coyuntural, sino que en 2011,  con un Gobierno en condiciones de dialogar con más fortaleza política que el actual podamos proponer un nuevo pacto fiscal".

Puig ha vaticinado que las relaciones entre Cataluña y el resto de España están entrando "en una nueva etapa" y ha agregado: "Esta legislatura será la de la ruptura con un modelo que tiene que dar satisfacción a Cataluña, porque si no esto del derecho a decidir nos lo tendremos que empezar a plantear en serio".