Suleimán pide a los jóvenes egipcios que se conformen y se vayan a casa
- Ha pedido a la población que no se deje llevar por el caos
- Asegura que "el cambio ya ha comenzado"
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El vicepresidente egipcio, Omar Suleimán, ha calificado la situación que vive el país árabe de "momento decisivo" y ha asegurado que "la puerta está abierta a más diálogo". Por ello, ha instado a los jóvenes y a los manifestantes a que vuelvan a sus casas y a sus puestos de trabajo.
Suleimán ha hecho estas declaraciones en un discurso dirigido a la nación poco después de que el presidente del país, Hosni Mubarak, delegara en él la mayoría de sus prerrogativas, aunque conserva otras fundamentales.
Llamamientos sucesivos
El vicepresidente también ha querido hacer un llamamiento a la unidad y ha pedido a los ciudadanos que "trabajen juntos para hacer un futuro brillante", en un discurso televisado.
"Llamo a todos los ciudadanos para que trabajen juntos para lograr un futuro brillante. No nos podemos dejar llevar por el caos", advirtió Suleimán.
También se ha comprometido "a llevar a cabo una transición pacífica del poder de acuerdo a la Constitución".
"Estoy aferrado a todos los procedimientos que se acuerden en el diálogo nacional", que ha comenzado el pasado domingo entre Suleimán y grupos y personalidades de la oposición, ha manifestado el vicepresidente en un discurso dirigido a la nación.
También ha reiterado la necesidad de recuperar la confianza de acuerdo con la Constitución y la ley.
Suleimán también ha confirmado que había recibido de Mubarak algunas prerrogativas presidenciales y dijo que se había "comenzado el trabajo con las Fuerzas Armadas".
Con todo, también ha dirigido un mensaje a los convocantes de las protestas en Egipto: "El movimiento del 25 de enero ha logrado con éxito generar un cambio global en la marcha de la democracia. El cambio ya ha comenzado".
Con todo, estas palabras no se sabe si calmarán a las decenas de miles de manifestantes concentrados en la plaza Tahrir que han recibido con rabia y tristeza el discurso a la nación del presidente egipcio, Hosni Mubarak.