La diplomacia italiana se despliega para abordar la crisis de la inmigración

• Han llegado siete mil personas en cinco días
• No se controla la salida de pateras

Emigración masiva de tunecinos a Italia

Lampedusa se ha convertido en la isla de la espera. Ya está abierto el centro de primera acogida para   hospedar a los norteafricanos llegados en los últimos días. Las autoridades se resistieron a la reapertura de la instalación donde se vivieron episodios violentos en el pasado. Pero el continuo   arribo de   barcos no ha dejado otra alternativa.

Algo más de dos mil inmigrantes sin papeles permanecen aguardando su traslado a la península.  

Este lunes se ha parado el flujo de embarcaciones en el estrecho de Sicilia. Tal y como señala el comandante de la guardia costera, el último desembarco se produjo el domingo a las 20.30. Este lunes ni ha llegado, ni se detectado ninguna embarcación.

Prioridad: sacar a los menores

Reabierto el centro de primera acogida de Lampedusa, los inmigrantes han pasado allí la noche pero tienen las puertas abiertas y salen libremente a pasear por la isla a la espera de su traslado. 

la una de la tarde una pequeña embarcación se ha llevado a 120 personas con destino Sicilia. La prioridad es sacar a los menores y los que llevan más días en la isla.

El ministro del interior italiano, Roberto Maroni, dice que se puede calificar esta situación como la caída del muro de Berlín del Magreb.

Las autoridades tunecinas informan este lunes de que el jueves murieron 40  personas ahogadas cuando una embarcación se hundió. También se han  mostrado partidarias a colaborar pero advierten de que no permitirán  injerencias.

Italia, sola en la crisis

La diplomacia italiana se despliega: el ministro de asuntos exteriores, Franco Frattini   viaja este lunes a Siria, Jordania e Túnez en un intento de   tomar la temperatura a la región y poner freno a la llegada de inmigrantes sin papeles. 

El jefe de la diplomacia propone un plan Marshall para la zona como vacuna contra la invasión de barcas norteafricanas y para crear desarollo en la zona.

La revolución del norte de África ha olvidado los pactos con Europa y no se controla la salida de pateras. En las últimas horas Túnez ha desplegado su ejército para evitar esta huida masiva. Es la manera en que responde el país norteafricano a la solicitud italiana de permitir que su ejército   trabaje en el interior del país. 

De momento nada de militares italianos en Túnez   pero las autoridades norteafricanas sí han mostrado su disposición a colaborar con otros países. Los que llegan aseguran que nada ha cambiado.

Entre los llegados, algunos pedirán asilo político pero la mayoría solo quiere trabajo. Mientras tanto, los tunecinos llegados en las primeras horas se distribuyen por el país.  Más de 100 han sido detenidos esta madrugada en un tren en Bolonia.  Todos eran adultos varones y viajaban sin papeles.

Los tunecinos pagan 1.500 euros por una travesía incierta para, después, ser abandonados en una playa.

Italia se siente abandonada de Europa en esta crisis. Esta semana habrá cumbre europea sobre el tema y este lunes por la tarde nueva reunión en el ministerio del interior para analizar la situación.