Los hermanos Del Valle declaran este miércoles en el juicio por la muerte de Mari Luz
- Arranca la vista oral por el asesinato de esta niña en enero de 2008
- Santiago del Valle será juzgado por un tribunal profesional y no popular
La Sección Primera de la Audiencia Provincial de Huelva celebra a partir de este miércoles la vista oral en la que se juzgará a Santiago del Valle y su hermana Rosa por el asesinato de la niña Mari Luz Cortés en enero de 2008. Un juicio que se prolongará hasta el 25 de febrero y que ha estado marcado desde el inicio por numerosos errores judiciales y procesales.
La primera sesión de este juicio, que comenzará a las 9.30 horas, estará marcada por la declaración de los principales acusados: Santiago del Valle, que se enfrenta a penas de entre 23 y 32 años de prisión por los delitos de asesinato y abuso sexual; y su hermana Rosa, acusada de asesinato, para quien la Fiscalía y la acusación particular piden 17 años de cárcel.
El pasado 11 de enero, la Audiencia Provincial denegó la puesta en libertad de Rosa del Valle, tras llevar tres años en prisión preventiva por estos hechos.
También está previsto que por la tarde comparezca como testigo Isabel García, mujer de Santiago del Valle, que en los últimos días ha cambiado su declaración inicial acusando a la hermana de su marido, informa Efe.
El tribunal está compuesto por tres magistrados encabezados por el juez Antonio Germán Pontón, tras desecharse la opción de un jurado popular.
Errores judiciales y procesales
Mari Luz Cortés, que tenía 5 años, desapareció el 13 de enero de 2008 en la barriada de El Torrejón de la capital onubense después de abandonar su domicilio para ir a comprar golosinas a un quiosco cercano.
Permaneció 54 días desaparecida hasta que el 7 de marzo de 2008 un operario de Cepsa encontró su cuerpo en el puerto de Huelva. Diecinieve días después fueron detenidos en Cuenca Santiago del Valle, su esposa, Isabel García, y la hermana de Santiago, Rosa del Valle.
Según Efe, el caso Mari Luz ha estado marcado por los errores judiciales ya que cuando sucedieron los hechos Santiago del Valle debería de haber estado en prisión ya que contra él pesaba una sentencia de la Audiencia Provincial de Sevilla por abusos sexuales contra su propia hija que llevaba dos años y medio sin ejecutarse.
Este error llevo al Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) a abrir expediente a Rafael Tirado, el juez titular del Juzgado de lo Penal número 1 de Sevilla, que no ordenó ejecutar la sentencia, al que finalmente se le impuso una multa de 1.502 euros por una "falta grave.
El Ministerio de Justicia hizo lo propio con la secretaria judicial Juana Gálvez por un presunto incumplimiento de sus obligaciones legales a la que se suspendió dos años y medio de empleo y sueldo.