Hungría modifica su "ley mordaza" tras las presiones de la UE
- Budapest asegura que es "la conclusión de un diálogo"
- Varios países habían mostrado su rechazo a la legislación
El gobierno de Hungría presentará enmiendas a su ley de medios en el Parlamento dentro de dos semanas para adecuar la legislación a las exigencias de la Unión Europea.
Tras las conversaciones mantenidas con la Comisión Europea, Hungría ha decidido retirar una disposición que exige a los medios de comunicación una cobertura equilibrada de las informaciones, bajo pena de multa.
Además, ya no se aplicarán multas a las empresas de medios húngaras en el extranjero y no será necesaria la inscripción previa en un registro de medios para poder trabajar, según ha explicado el secretario de Estado, Zoltan Kovacs.
Preocupación europea
La Comisión había expresado su preocupación por que la ley húngara aplicase de forma desproporcionada las normas exigidas sobre una información equilibrada, multas a medios establecidos legalmente en otros Estados miembros, reglas para el registro y autorización de proveedores de servicios de noticias y contra eventuales ofensas a individuos, minorías o mayorías.
Kovács ha explicado que "se trata de puntualizaciones" de la legislación y que el acuerdo de este miércoles entre Budapest y la CE significa "la conclusión de un diálogo" para resolver los problemas presentados sobre la polémica legislación, llamada "ley mordaza" para la prensa húngara.
En las conversaciones directas entre la CE y Hungría se había acordado la enmienda que anula la prohibición de insultar a personas, grupos étnicos y religiosos, que da amplio margen de interpretación y prohíbe discriminar a esos colectivos.
En concreto, la prohibición aludía sin mencionarlo explícitamente a comentarios hostiles aparecidos en los medios en el pasado, entre otros, sobre grupos étnicos como los gitanos, comunidad de casi medio millón de personas en Hungría.
Presión de varios países
Los cambios en dicha ley también garantizan que los proveedores de servicios audiovisuales establecidos legalmente y autorizados en otro país de la UE no puedan ser multados por violar lo establecido en la normativa húngara contra la discriminación.
Por otro lado, las enmiendas clarifican que los servicios audiovisuales a la carta, editores y proveedores de servicios complementarios sólo tendrán que registrarse después de que empiecen a ofrecer sus servicios (en un plazo de 60 días).
Según la CE, esto quiere decir que los proveedores de servicios audiovisuales a la carta establecidos en Hungría y otro Estado miembro de la UE ya no necesitarán una autorización previa de las autoridades húngaras.
Hungría, que desempeña la presidencia semestral de la UE hasta junio, ha reiterado que aplicará "una legislación que armonice con la interpretación que dé la CE".
La ley de medios, aprobada por el Parlamento húngaro a finales de diciembre, ha provocado duras críticas en muchos países europeos que consideran que cercena la libertad de prensa