Un testigo del caso Mari Luz asegura que vio a Del Valle meter un carro de la compra en un coche

• En su primera declaración ante la Policía no reconoció a los acusados
• El director del Colegio Diocesano dice que Del Valle "molestaba" a las alumnas
• En la segunda jornada del juicio declararán en total 15 testigos

Un testigo del caso Mari Luz dice que vio a los hermanos Del Valle meter un carrito en un coche

En el segundo día del juicio del caso Mari Luz, en el que se juzga a Santiago del Valle y a su hermana Rosa por el asesinato de la niña onubense, uno de los testigos ha aportado nueva información al tribunal.

Se trata del taxista E.D, que trabajaba en la zona del barrio de El Torrejón el 13 de enero de 2008, cuando desapareció Mari Luz. El taxista ha asegurado que vio a los acusados intentando meter un carrito de la compra en el maletero de un coche. Desde una ventana les observaba la mujer del acusado, Isabel García.

En su declaración inicial ante la Policía, este testigo dijo que no podía reconocer a las personas a las que había visto. Sin embargo, este jueves E.D. ha asegurado que, aunque no se recoja en su declaración, él sí había indicado este dato a la policía, y ha insistido en que es la verdad.

El taxista ha relatado al juez que vio cómo Rosa del Valle llegó ante su casa con el vehículo y paró. Entonces Santiago salió del portal con un carrito.

"Salió del portal con un carrito de la compra a pulso; fue a introducirlo en el maletero pegando voces y su hermana lo ayudó, entonces lo cogieron entre los dos porque él sólo no podía". Ambos trataron de meterlo en el maletero y Santiago se alteró porque resultaba difícil. Finalmente, tras varios intentos, lograron introducirlo en el coche.

El abogado de Rosa del Valle, Manuel Domínguez, ha dudado de la veracidad de la declaración y ha ironizado sobre la "capacidad sobrehumana" del testigo para percibir tantos detalles en un minuto.

Afirman que Del Valle "molestaba" a las alumnas

Este jueves declararán un total de 15 testigos, entre las sesiones de mañana y tarde. Entre ellos han prestado declaración el director y una de las profesoras del Colegio Diocesano, en el que estudiaba la niña, y que han destacado el comportamiento inapropiado de Santiago del Valle con las alumnas.

Se da la circunstancia de que de Del Valle, acusado de asesinato junto a su hermana Rosa, estaba matriculado en este mismo centro en un Ciclo Formativo de Comercio en octubre de 2007.

Rafael Repiso, director del colegio, ha declarado ante el tribunal de la Sección Primera de la Audiencia Provincial de Huelva que el acusado estuvo en el centro menos de quince días y luego fue expulsado por su comportamiento.

Repiso ha asegurado que antes de la matriculación la Delegación de Educación indicó al centro que Santiago del Valle tenía que ir a firmar a la Policía dos veces al mes por problemas con la Justicia, aunque nunca se le precisó la causa.

Según ha relatado el director, las alumnas se quejaban de que a del Valle "lo que menos le importaba eran las clases", y que intentaba mantener conversaciones de tipo "sexual". Algunas incluso se quejaban de que "las molestaba bastante".

La mayoría de los alumnos del ciclo en el que se matriculó el acusado eran mujeres de entre 16 y 17 años.

Por su parte, Rocío Camacho, profesora de Informática del ciclo, ha explicado que un día al llegar a clase las chicas estaban "nerviosas" porque Santiago del Valle había dibujado en la pizarra el esquema de un burdel y les sugería que "tuvieran relaciones con mayores de 40 años".

Al ser amonestado replicó que "no había hecho nada malo y que hablar de sexo era algo natural".

Durante este periodo no se recibieron ningún tipo de denuncias por tocamientos, si bien a una de las alumnas "le llegó a insinuar que se sentara" en sus piernas.

También ha comparecido el quiosquero del barrio de El Torrejón, una de las últimas personas que vio a Mari Luz con vida. El hombre ha declarado que la niña le compró unas golosinas y se fue por la misma dirección por la que había llegado.

La familia se queda fuera

La familia de Mari Luz ha decidido este jueves quedarse fuera de la Audiencia, porque no se encuentran cómodos en la sala habilitada para ellos.

El padre, Juan José Cortés, ha explicado que prefieren "estar en la calle" porque su esposa, Irene Suárez, "no puede estar en lugares cerrados" ya que se encuentra bajo tratamiento psicológico. "Todo está siendo abominable", ha añadido.

La Junta de Andalucía ha anunciado que habilitará otra sala más amplia en el Palacio de Justicia para que la familia pueda seguir el juicio.

Santiago del Valle niega las acusaciones

En la primera jornada del juicio Santiago del Valle negó las acusaciones y aseguró que no tiene "ni idea de lo que le pasó a la niña" porque no estuvo con ella "en ningún momento".

Del Valle declaró que las primeras declaraciones que realizó en Pajaroncillo (Cuenca) cuando fue detenido y ante el Juzgado de Instrucción número 1 de Huelva, en las que manifestaba su culpabilidad, las hizo "coaccionado".

Por su parte su hermana, Rosa del Valle, se negó a prestar declaración