Un atentado suicida mata a 30 personas en la provincia afgana de Kunduz
- Se produce 48 horas después de otro en el que murieron 38 personas
- Hay, además, 37 heridos por la explosión, según algunas agencias
Un atentado suicida ha causado 30 muertos en la provincia de Kunduz, en el norte del país. Allí la insurgencia talibán ha ido ganando fuerza en los últimos dos años.
La masacre se ha producido en un edificio gubernamental, en el que el suicida ha detonado su explosivo frente a la oficina de registro estadístico, donde un grupo de personas había ido a recoger sus documentos de identidad.
Pese a estar situada en el relativamente tranquilo norte afgano, en Kunduz hay varias bolsas de población pastún, de la que provienen tradicionalmente los talibanes.
El sábado hubo otro atentado
Este atentado tiene lugar dos días después de que 38 personas murieran y más de 70 resultaran heridas en un atentado contra un banco en la ciudad de Yalalabad, en el este de Afganistán.
En un principio, las autoridades informaron de la muerte de 18 personas, pero el número de víctimas fue aumentando conforme pasaban las horas.
Varios terroristas irrumpieron en el interior del banco y abrieron fuego contra los clientes, funcionarios y empleados que se encontraban allí, según comentaban varios testigos.
Según el gobernador provincial, el ataque fue perpetrado por siete terroristas suicidas. Un hecho condenado horas más tarde por el presidente afgano, Hamid Karzai, que lo calificó como "antiislámico".
El atentado fue cometido en una delegación del Banco de Kabul, "a la que acuden los afganos para realizar sus transacciones diarias y cobrar sus salarios", indicó el presidente.
Los atentados suicidas son una de las acciones más recurrentes de los insurgentes talibanes, en su lucha contra el Ejército afgano y las tropas internacionales presentes en el país, para implantar un régimen de corte fundamentalista islámico. Cada año mueren en Afganistán varios miles de personas víctimas de la violencia.