El BCE exige mayores sanciones en la reforma económica de la Unión Europea
- La autoridad monetaria ha elaborado un decálogo de sugerencias para los Estados
- Pide más coordinación y aboga por sanciones más ágiles contra el déficit
El Banco Central Europeo (BCE) ha exigido una vigilancia más severa de la situación presupuestaria y de la deuda de los países de la zona del euro, así como sanciones más estrictas en la reforma de la coordinación económica en el seno de la Unión Europea (UE).
En un informe sobre la reforma de la gobernanza económica en la Unión Europea, aboga por revocar los cambios realizados la Pacto de Estabilidad y Crecimiento en 2005 que permitieron a los Estados miembros un mayor margen de maniobra.
El BCE señala que las propuestas de la Comisión Europea en este sentido contribuyen a un importante fortalecimiento y ampliación de la vigilancia económica y presupuestaria dentro de la Unión Europea, aunque "para la zona del euro se debe prever una estructura de gobierno más ambiciosa para asegurar el suave funcionamiento de la Unión Económica y Monetaria (UEM)".
Acabar con las excepciones
Con este objetivo, el consejo de Gobierno del BCE ha elaborado un conjunto de 10 sugerencias que podrían fortalecer las propuestas de la Comisión. A este respecto, aclara que, aunque sus recomendaciones no requieren cambios en los tratados europeos, la UE debería considerar realizarlos "en algún momento" para fortalecer la gobernanza económica.
En concreto, la institución presidida por Jean Claude Trichet considera necesario una mayor "automaticidad" en todos los procesos de vigilancia, incluso los nuevos adoptados para el marco macroeconómico, que reduzcan la capacidad de los Estados miembros de suspender o detener los procedimientos contra ellos cuando no cumplan con las exigencias del Pacto.
Asimismo, defiende el establecimiento de plazos estrictos que eviten largos procedimientos, así como eliminar las "cláusulas de escape". En este sentido, apuesta por no permitir al Consejo Europeo o a la Comisión extender los plazos pare corregir un déficit excesivo durante una grave crisis económica de carácter general ni reducir o cancelar las sanciones financieras.
Sanciones más ágiles
Para ello, reclama una aplicación más temprana y más gradual de las sanciones financieras en el marco de la vigilancia macroeconómica que aporte "claros incentivos" a las políticas apropiadas, así como la introducción de medidas políticas y de reputación que fomenten el cumplimiento de los principios del marco de vigilancia.
El BCE también cree que el nuevo marco de vigilancia macroeconómica debería centrarse en los países de la zona euro con grandes déficits por cuenta corriente, significativas pérdidas de competitividad y altos niveles de deuda pública y privada, así como con otras vulnerabilidades que amenacen la Unión Monetaria y Económica.
Por otro lado, el instituto emisor demanda "ambiciosos" puntos de referencia cuando se conozca la existencia de un déficit excesivo y que se "reduzca claramente" la posibilidad de recurrir a "factores relevantes" para justificar esas desviaciones.