Un "cactus andante" con 20 patas, el primer antepasado de las arañas

• Su fósil data de hace 520 millones de años
• Esta criatura tenía diez pares de patas articuladas y medía 6 cm de longitud
• Se llama 'Diania cactiformis' y habitaba en los fondos de los mares asiáticos

La 'Diania cactiformis' puede ser el antepasado más antiguo descubierto hasta ahora de las actuales arañas

Un cactus andante que tenía diez pares de patas articuladas. Medía 6 centímetros de longitud. Habitó en las profundidas de los mares asiáticos hace más de 520 millones de años y puede ser el antepasado más antiguo descubierto hasta ahora de las actuales arañas.

Esta extraña criatura se llama Diania cactiformis y se considera el primer eslabón perdido conocido entre los gusanos y los artrópods.

La D. cactiformis habitaba el fondo marino de lo que hoy es la provincia de Yunnan, en la cordillera del Himalaya y al suroeste del país asiático.

Y "su importancia es que los artrópodos son uno de los grupos de animales invertebrados de mayor éxito y es muy bonito haber descubierto al que puede ser el animal más primitivo de este grupo con patas articuladas", reconoce la responsable de la investigación, Jianni Liu, de la Northwest University de Xian, China.

Este descubrimiento, publicado en la portada de la prestigiosa revista Nature, "aporta evidencias de que los artrópodos evolucionaron a partir de los antepasados de los gusanos", cuyos registros fósiles se remontan al periodo Cámbrico.

“Al verlo solo pense qué será este animal con cuerpo blando y patas tan duras“

Su fósil fue descubierto en el año 2006 durante una excavación en la provincia china de Yunnan y "fue realmente sorprendente" señala Liu. "Lo primero que me pregunté fue qué sería este animal con el cuerpo blanco y las patas tan duras",

Después, tras analizarlo y observarlo en el microscopio, afirma la investigadora, "me dí cuenta de que no era solo un animal divertido, si no que era un descubrimiento muy importante", como recoge National Geographic.

Según los científicos, la Diania se podía desplazar a gran velocidad y saltar con gran agilidad, pero estas magníficas condiciones físicas no evitaron que también se extinguieran.

El equipo considera, incluso, que algunos de los apéndices estos animales evolucionaron hasta convertirse en articulaciones depredadoras que dieron más capacidad de supervivencia a los artrópodos.