La Policía tunecina disuelve una manifestación que pedía la dimisión del Gobierno
- El centro de la ciudad quedó cortado al tráfico
- Interior pide a los padres que impidan a sus hijos manifestarse
La Policía tunecina ha disuelto con el empleo de abundante material antidisturbios a varios cientos de jóvenes que se habían congregado ante la sede del ministerio del Interior para exigir la dimisión del Gobierno de transición en pleno.
La Policía dispersó rápidamente a los jóvenes, que huyeron por la avenida Burghiba y las calles adyacentes, perseguidos por los agentes.
Al mismo tiempo, unos 500 manifestantes se concentraron en la parte posterior del ministerio mientras la Policía volvía a cargar contra ellos con botes de humo y porras.
Dicho grupo salió huyendo en dirección a la plaza de Barcelona, próxima al Ministerio del Interior y en la que está situada la estación central de ferrocarriles, mezclándose con la gente que se encontraba allí.
El tráfico permaneció cortado en la zona central de la capital tunecina, cuyos comercios igualmente cerraron las puertas, y por la que sólo circulaban vehículos de la Policía.
Las fuerzas antidisturbios han desplegado un importante dispositivo de seguridad en toda la zona adyacente al Ministerio del Interior para evitar nuevas concentraciones.
Estos incidentes parecen continuar los ocurridos en la noche de este viernes en la capital, donde una treintena de personas resultaron heridas cuando la Policía cargó contra decenas de miles de manifestantes congregados ante la Oficina del primer ministro para exigir la dimisión del jefe del Ejecutivo de transición, Mohamed Ghanuchi.
Durante los enfrentamientos los manifestantes incendiaron la sede del Ministerio de Turismo, situado enfrente del de Interior, y quemaron diversos contenedores de basuras y mobiliario urbano.
El Ministerio del Interior exhorta a que cesen las manifestaciones
El Ministerio tunecino del Interior ha exhortado a las familias con hijos en edad escolar y universitaria a que no les permitan sumarse a las manifestaciones que se están desarrollando en la capital del país y cuyos protagonistas son en su gran mayoría jóvenes.
En un comunicado difundido este sábado, el Ministerio del Interior pide a los padres de los jóvenes que les impidan participar "en actos de vandalismo" y les convenzan para que regresen a sus escuelas y universidades "y evitar así que sean utilizados como escudos humanos por los instigadores de estos actos".
Interior apela a los padres "a asumir su responsabilidad en esta coyuntura excepcional y difícil y a no implicar a sus hijos en problemas, por bienintencionados que sean sus motivos".