La ONU discute la Libia post-Gadafi mientras la CPI inicia la investigación por crímenes de guerra
- El Consejo de Derechos Humanos celebra una sesión extraordinaria
- Clinton, Hague, Westerwelle, Lavrov y Jiménez intervendrán en la sesión
- El fiscal de La Haya trabaja en el examen preliminar del caso
Los representantes de la diplomacia mundial se reúnen en Ginebra en el marco del Consejo de Derechos Humanos de la ONU para preparar una respuesta a la crisis libia pensando ya en la era 'post-Gadafi' mientras que el fiscal de la Corte Penal Internacional trabaja ya en el examen preliminar de los crímenes de guerra en el país nortefricano.
La reunión del consejo ha sido inaugurada por la alta comisionada de la ONU para los Derechos Humanos, Navi Pillay, que ha pedido a la comunidad internacional que consolide los cambios conquistados por los levantamientos populares en el Norte de África "antes de que fuertes intereses empiecen recobrarse o que aparezcan nuevas amenazas".
Pillay ha declarado que en Oriente Medio hay consciencia de que la "euforia" que se vive actualmente con las rebeliones civiles que registran en varios países es un estado de ánimo pasajero, por lo que "la labor de recobrar la confianza en instituciones de gobierno y entre las comunidades debe empezar lo más pronto posible".
La comisionada también ha señalado que también es una prioridad "garantizar que las víctimas de los abusos actuales y pasados reciban Justicia".
Ante la CPI
Por este motivo, el fiscal general de la Corte Penal Internacional (CPI), Luis Moreno Ocampo, ha anunciado que ha iniciado un examen preliminar sobre presuntos crímenes de guerra y lesa humanidad cometidos en Libia.
El fiscal ha adelantado en una rueda de prensa que esperaba decidir "esta semana" si abre una investigación formal, lo que pondría al líder libio, Muamar el Gadafi, en el punto de mira del organismo judicial de la ONU.
La Fiscalía está reuniendo información preliminar para "estar lo más preparado posible" cuando el Consejo de Seguridad de la ONU le envíe documentación sobre el caso.
El Consejo de Seguridad de la ONU aprobó el fin de semana pasado una resolución que incluye sanciones económicas contra el régimen libio y su líder, Muamar el Gadafi, y denuncia la represión contra la población civil, considerándola como un posible crimen de lesa humanidad susceptibles de ser juzgado en la CPI, con sede en La Haya.
Presencia masiva de ministros de Exteriores
Mientras, los líderes de la diplomacia de las potencias occidentales han acudido a la reunión de Ginebra para empezar a dibujar la era 'post-Gadafi'.
La secretaria de Estado de EEUU, Hillary Clinton, la jefa de la diplomacia europea, Catherine Ashton, los ministros de Exteriores de Rusia, Sergey Lavrov; del Reino Unido, William Hague, de Alemania, Guido Westerwelle, Italia, Franco Frattini, y la ministra de Asuntos Exteriores española, Trinidad Jiménez.
Jiménez ha demandado a la comunidad internacional que apoye los procesos de cambio que se están produciendo en el norte de África, así como "seguir reaccionando con toda firmeza ante la barbarie de los dirigentes libios".
Jiménez ha asegurado que las transformaciones en la ribera sur del mediterráneo "son fruto de las demandas de los ciudadanos. .. demandas que son legítimas y deben ser escuchadas".
"La comunidad internacional debe acompañar, con su respaldo político y financiero, estos procesos para que culminen con éxito", ha señalado.
Acerca de la crisis en Libia, Jiménez ha indicado: "en momentos en que los acontecimientos del norte de África nos traen alarmantes noticias de graves violaciones de los derechos humanos por parte de Libia, quiero insistir en la necesidad de redoblar nuestros esfuerzos en la exigencia del respeto de estos derechos"
También tendrán reuniones privadas al margen de este foro en un intento por converger en ideas y propuestas comunes que serán dadas a conocer esta tarde.
En este sentido, Clinton apuntaba a su llegada a Ginebra el domingo por la noche que tiene la intenciónde preparar la etapa "post-Gadafi" en Libia, haciendo hincapié en que la comunidad internacional debe elaborar una respuesta "humantaria" pero también "política".