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Milicianos pro-Gadafi impiden que los refugiados lleguen hasta el puesto fronterizo con Túnez

  • ACNUR detecta una bajada en el número de personas que llegan a la frontera 
  • 12.500 personas esperan para ser evacuadas a sus países 
  • 10.000 ciudadanos de Bangladesh han abandonado Libia 

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La ayuda internacional llega, poco a poco, a la frontera entre Túnez y Libia

Hombres armados partidarios del líder libio Muamar Gadafi podrían estar impidiendo la huida de los refugiados a través de la frontera con Túnez.

Este es el temor del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR), que ha constadado un parón repentino en el número de personas que han cruzado la frontera.

Este jueves pasaron un total de 2.000 personas, cuando lo normal desde el 20 de febrero eran 10.000 o 15.000 diarias. 40.000 personas podrían estar atrapadas en el lado libio de la frontera.

El proceso de evacuación está en marcha, pero aún se calcula que unos  12.500 refugiados esperan salir de Túnez y volver a sus países. De no ser así, la situación en el campamento podría convertirse en una emergencia humanitaria.

"Aún hay mucho que hacer y pedimos la ayuda de todos los países", dice un portavoz de ACNUR.

Por su parte, la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) ha informado de que al menos 186.000 personas ya han logrado huir del conflicto en Libia con destino a Túnez, Egipto y Níger. En declaraciones recogidas por EFE, la portavoz de la organización, Jemini Pandya, ha especificado que 104.000 han cruzado por el paso de frontera de Ras el Jedir a Túnez; otros 69.000 han llegado a Egipto y 3.000 a Níger.

Éxodo de trabajadores de Bangladesh

Mientras tanto, unos 10.000 bangladeshíes huyen del país. Constituyen la segunda nacionalidad más numerosa entre los refugiados después de la egipcia.

Su situación es difícil, ya que Bangladesh no tiene embajada en Túnez y nadie se hace responsable de ellos.

"Los militares nos apuntaban y nos quitaban el dinero, el móvil, todo", dice uno de los refugiados.

La mayoría recorre a pie la distancia de ocho kilómetros entre la valla fronteriza y el campamento establecido por las organizaciones internacionales.