Todo tiempo pasado... ¡fue igual!
- Echamos la vista 37 años atrás y encontramos las mismas noticias
- Se limitaba la velocidad, Gadafi estaba aislado y había problemas económicos
“El libro de historia del estante siempre se está repitiendo”. Escrito así, de repente, despista, pero si les decimos que es la traducción de un fragmento de Waterloo, la canción de Abba que ganó Eurovisión hace 37 años, igual saben de qué estamos hablando.
Nos referimos a las vueltas que da la vida. Vueltas en círculo, de hecho, y, si no, viajemos en el tiempo. Concretamente, a 1974.
El 7 de abril de ese año, las portadas de los periódicos españoles eran muy, muy parecidas a las de estos días. Tanto que asuntan. Si echamos un ojo a la del diario Ya, nos encontramos el siguiente titular:
“Noticias confusas sobre un posible relevo de Gadafi”. Los periodistas hablaban aquellos días de un nuevo periodo de incertidumbre en Libia tras el anuncio de que el coronel Gadafi había sido relevado de la mayor parte de sus deberes de Estado.
El diario Informaciones titulaba: "Kadafi, arrinconado en Libia". Y explicaba: “La decisión anunciada este fin de semana constituye una sorpresa, a pesar de que las frecuentes extravagancias del coronel libio en política internacional y doméstica le crearon constantes conflictos con sus colegas revolucionarios (...) Según ha señalado el ministro de Información, el coronel Kadafi odia ceremonias y protocolos, como recibir a jefes de Estado y pasar revista a guardias de honor”.
Limitar la velocidad por problemas energéticos
Pero no es, ni de lejos, la única coincidencia. El lunes 8 de abril de aquel año, Ya llevaba en su portada: “Mañana entran en vigor los límites de velocidad para automóviles. 130 kilómetros por hora en autopistas; 110, en autovías; 90, en carreteras normales; y 60 kilómetros por hora, en vías urbanas”. Los límites difieren de los actuales, es verdad, y también las multas: “Las infracciones serán castigadas con multas de 250 a 5.000 pesetas y, en ocasiones, con suspensión de hasta tres meses del permiso de conducir”.
La nueva norma se aprobaba “en base a las circunstancias actuales de abastecimiento de carburantes”. El diario Informaciones era algo más conciso y explicaba: “El preámbulo de la orden justifica la aplicación de estas medidas de limitación de velocidad en la actual situación energética por la que atraviesa el mundo”.
Año difícil para la economía española
“1974, año difícil para la Economía española”. Otro titular que produce vértigo. Era 1 de abril de 1974. Informaciones explicaba algo que puede que le suene a más de uno: “El año se presenta como un ejercicio difícil, que planteará serios problemas económicos tanto de orden interno como externo al empresario español (…) Los problemas fundamentales son cuatro: crisis energética, escasez y alza en las materias primas, inestabilidad monetaria internacional y descenso del ritmo económico en los principales países con los que se realiza nuestro comercio.
¿Qué pasó años después?
La crisis del petróleo de 1973 –la primera de tipo energético– comenzó a raíz de la decisión de la Organización de Países Árabes Exportadores de Petróleo de no exportar más petróleo a los países que habían apoyado a Israel durante la guerra del Yom Kippur, que enfrentaba a Israel con Siria y Egipto.
El precio del petróleo se cuadruplicó desde 1974 hasta llegar casi a los 12 dólares por barril. El aumento del precio unido a la gran dependencia que tenía el mundo industrializado del petróleo de la OPEP, provocó un fuerte efecto inflacionista y una reducción de la actividad económica de los países afectados.
A partir de esta crisis de precios, los países occidentales iniciaron políticas de diversificación y ahorro energéticos y, entre otras medidas defensivas, se creó la Agencia Internacional de la Energía (AIE).
El embargo se levantó en marzo de 1974, después de las negociaciones de la Cumbre Petrolífera de Washington, pero los efectos de la crisis energética se notaron durante toda la década de los 70.
La economía española entró en una nueva fase expansiva desde la segunda mitad de 1985. Entre los factores que contribuyeron al cambio de ciclo, hay que destacar la entrada de España en la Comunidad Económica Europea y la nueva situación petrolífera mundial, con unos precios del crudo bajos a escala internacional.
Con respecto a los límites de velocidad de 1974, los primeros que hubo en España, duraron hasta 1976, que fue otro año de problemas energéticos. Durante cinco años -hasta 1981- se estableció en las carreteras españolas un límite de velocidad de 100 km/h en autovías y vías rápidas. En 1981, se pasó al límite de los 120 kilómetros por hora.