AENA y sindicatos siguen negociando para intentar desconvocar la huelga
- No hay acuerdo de momento, pero esta tarde se vuelven a reunir
- Los paros afectan a un 71% de la plantilla, unos 9.600 trabajadores
Enlaces relacionados
La mesa negociadora entre Aeropuertos y Navegación Aérea (AENA) y los representantes de los sindicatos CC.OO, UGT y USO vuelve a reunirse esta tarde para intentar evitar los paros convocados por los trabajadores, que afectan a 22 días entre los meses de abril y agosto. En el primer encuentro matinal no han logrado un acuerdo.
Los trabajadores ven con malos ojos la concesión a empresas privadas de la gestión de las dos principales joyas de la corona de AENA, Madrid-Barajas y Barcelona-El Prat, a la que temen sigan otras como Palma de Mallorca y Málaga.
El director de aeropuertos de Aena, Javier Marín, ha negado que se vayan a privatizar más aeropuertos y ha afirmado que los trabajadores de la empresa pública que pasen a las empresas concesionarias, mantendrán sus condiciones laborales. El escollo parece ser encontrar una fórmula jurídica para que esas garantías sean colectivas y no solo individuales.
Marín ha puntualizado AENA aceptará "todo aquello que sea jurídicamente viable y que no limite la competitividad que el sector necesita en los próximos años".
En declaraciones a Radio Nacional, el secretario de acción sindical de CC.OO. de AENA, José Luis García, ha asegurado que para que concluya la amenaza de paros, el Gobierno debe "aclarar" a los representantes sindicales el modelo "real" que se implantará en los aeropuertos y garantizar el "mantenimiento de la red de infraestructuras" en los mismos.
A su vez, García ha criticado que el proceso de privatización conllevará medidas que perjudicarán a los usuarios, como la subida de las tasas aeroporutarias, que supondrán un encarecimiento de los billetes.
Freno para el turismo
El sector turístico teme que la huelga frene su recuperación, y tanto AENA, como el Gobierno, los partidos políticos, los consumidores y algunos ejecutivos autonómicos también han alertado ya de los prejuicios que acarrearía la huelga.
Por ello, han expresado su confianza en lograr una solución negociada, algo por lo que también dicen apostar los sindicatos convocantes.
La convocatoria de huelga coincide con días clave de Semana Santa, el Puente de Mayo y el Corpus, así como con las fechas de salida y retorno de las vacaciones de verano, en julio y agosto. (Consulta el calendario de la huelga).
Esta convocatoria se produce tan sólo tres meses después de la huelga de los controladores aéreos, por la que el Gobierno decretó el estado de alarma por primera vez en la historia de la democracia.
Los paros -convocados contra la privatización del 49% de AENA- afectan a un 71% de la plantilla, unos 9.600 trabajadores, ya que los controladores tienen su propio convenio y, además, hay contratos temporales que pueden expirar antes de que se produzcan los paros.
Según los sindicatos, la privatización parcial de AENA empeorará el modelo de gestión aeroportuario, haciendo inviable la red de aeropuertos españoles y, además, provocará un incremento de las tasas aeroportuarias.
Mensaje de tranquilidad
El ministro de Fomento, José Blanco, aseguró el miércoles que con determinación y diálogo se logrará un acuerdo con los trabajadores de AENA, y confía en que se logrará encauzar la situación, al igual que ha ocurrido con los controladores aéreos.
De esta forma, Blanco ha querido tranquilizar a los ciudadanos que quieren coger vuelos en las fechas de la huelga.
"La política puede hacer lo imposible, posible", ha dicho el titular de Fomento al recordar que muchos daban por imposible que hubiera un nuevo convenio de los controladores aéreos.