La Policía detiene a 12 personas por falsificar permisos de conducir

• Los aspirantes al carnet de conducir recibían las respuestas por un receptor
• Un "gancho"se ocupaba de hacer funcionar los receptores

La Policía Nacional ha detenido a 12 personas, a las que acusa de un delito de falsedad, en Écija (Sevilla), con lo que ha desarticulado una red dedicada a facilitar permisos de conducir de forma fraudulenta, ha informado este sábado la policía.

En un comunicado, se indica que la investigación comenzó a finales del pasado año, cuando se detectó que una autoescuela presentaba a examen a personas de gran parte de la comunidad andaluza.

El responsable de la autoescuela investigada captaba personas en toda Andalucía, facilitando a cada uno de los alumnos, alguno de los cuales casi no sabía leer ni escribir, un transmisor-receptor para comunicarle las respuestas de los exámenes.

Un acuerdo previo facilitaba la interpretación de la respuesta correcta

A los examinandos se les comunicaba con anterioridad a la prueba que sentiría unas vibraciones, que si era una tan solo, tendría que contestar la respuesta A, si vibraba dos veces la respuesta sería la B, y así sucesivamente.

Posteriormente, se introducía en el aula de examen un "gancho", persona encargada de hacer funcionar los transmisores, con las vibraciones necesarias para facilitar la respuesta.

El "gancho", aunque conocía todas las respuestas, él nunca aprobaba para así examinarse todas las veces que quisiera y continuar con el fraude, y lleva "intentando aprobar", desde principios de marzo de 2010.

La Policía ha logrado detener de doce personas, diez de ellas aspirantes al permiso de conducir. A cada una de ellas se les intervino un transmisor-receptor, que llevaban adosado al cuerpo en el momento de salir del examen.

Entre los detenidos figuran el responsable de la autoescuela, F. S.F., de 57 años, con antecedentes policiales, y M. R.M., de 35 años y también con antecedentes.

A éste último se le intervinieron al salir del examen, tres transmisores-receptores y un pulsador, con el que ponía en funcionamiento los receptores de los demás alumnos.

Una vez finalizadas las correspondientes diligencias, los detenidos pasarán a disposición de la Autoridad Judicial competente, aunque la operación no se da por finalizada y no se descartan nuevas detenciones.