Se derrumba parte del edificio de la central nuclear de Fukushima después de una explosión
- La explosión no se ha producido en el reactor, según el Gobierno
- La radioactividad en la zona ha descendido tras la deflagración
- Once centrales nucleares continúan cerradas tras el terremoto
- La agencia de seguridad nuclear sitúa el inicidente en un nivel 4 sobre 7
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La radioactividad en el entorno de la central nuclear de Fukushima ha descendido tras la explosión que este sabado ha destruido parte de las instalaciones, según ha informado el Gobierno japonés.
El ministro portavoz, Yukio Edano, ha explicado que la deflagración se ha debido a una reacción química de oxígeno e hidrógeno y que no se ha producido en el reactor. En la explosión ha resultado heridos cuatro operarios.
Por su parte, el primer ministro, Naoto Kan, ha pedido calma a la población mientras se investiga la situación del reactor y se trabaja en su control.
La zona de seguridad en torno a la central se ha ampliado a 20 kilómetros, y la televisión japonesa NHK ha pedido a los ciudadanos en esta zona que se encierren en sus casas.
La agencia de seguridad nuclear japonesa ha catalogado el accicente con un nivel de gravedad 4 en una escala cuyo máximo se sitúa en 7.
Según la Escala Internacional de Sucesos Nucleares, el incidente de Chernóbil (Ucrania), que mató en 1986 a más de 100.000 personas, alcanzó un nivel 7, mientras el de Three Mile Island, en Estados Unidos, llegó hasta el nivel 5.
Fuga radioactiva "mínima"
Anteriormente, Naoto Kan, había declarado que la fuga de cesio radioactivo era "mínima". La falta de refrigeración en el núcleo del reactor tras el fuerte terremoto que este viernes golpeó al país puede producir un proceso de fusión en la central.
"Una subida inesperada de temperatura puede causar que el núcleo se convierta en una masa que puede fundir el fondo del reactor" - explica el servicio de información Stratfor en un informe citado por Reuters. "Esto puede desembocar en una liberación de radiación en el edificio contenedor".
El director de la campaña de energía nuclear de Greenpeace Internacional, Jan Benarek, ha declarado que las medidas de protección de la central de Fukushima "han fallado claramente". "¿Cuántos avisos más necesita sufrir la gente antes de que entendamos que los reactores nucleares son intrínsecamente peligrosos?", se ha preguntado Benarek en declaraciones a Europa Press.
Sin refrigeración en la central
De acuerdo con la información aportada por las autoridades niponas a la agencia nuclear de la ONU, el seísmo y el posterior tsunami cortaron el flujo de energía eléctrica en la central y el motor diesel de emergencia que debía suplir esa carencia tampoco funciona, debido a los daños causados por el desastre natural.
En la actualidad, las autoridades siguen tratando de arreglar el sistema alternativo de energía para poner cuanto antes en marcha el mecanismo de refrigeración de la central nuclear, señaló el OIEA en un comunicado difundido en Viena.
El combustible nuclear requiere de un enfriamiento continuo incluso cuando las instalaciones atómicas han dejado de funcionar, recuerda la agencia nuclear de la ONU.
También se han detectado anomalías en un segundo centro adyacente al primero, la planta número dos de Fukushima, en al que no se consigue rebajar la temperatura de tres de sus cuatro reactores nucleares, según el operador de las instalaciones, Tokyo Electric Power.
3.000 vecinos evacuados
La radiactividad ha subido a un nivel inusual y, aunque según la Agencia de Seguridad Nacional Nuclear, ello no supone una amenaza inmediata para los residentes, se ha ordenado la evacuación en un radio de 10 kilómetros en torno a la planta y 3.000 vecinos han sido evacuados.
Ambas plantas han sido puestas bajo el estado de mergencia por primera vez en su historia, mientras los expertos tratan de rebajar la presión en las campanas que contienen los reactores mediante la apertura controlada de válvulas.
La Agencia Nacional de Seguridad Nuclear ha señalado que la radiación en la sala de control de uno de los reactores de la planta número uno, ha alcanzado hasta mil veces su nivel habitual.
También ha indicado que se ha detectado un nivel de radiación ocho veces superior al normal en la entrada principal de la planta.
Once plantas nucleares paralizadas
El Organismo Internacional de la Energía Atómica (OIEA) busca más detalles sobre la situación en Fukushima Daiichi y otras plantas de energía nuclear y reactores de investigación, incluyendo información sobre suministros de energía eléctrica, los sistemas de refrigeración y la condición de los reactores", afirma.
El terremoto ha paralizado la actividad de once centrales nucleares, aunque el Gobierno japonés ha negado la existencia de fugas radiactivas.
No obstante, como dicta el protocolo nipón en estos casos, el Ejecutivo ha decretado el estado de emergencia de energía nuclear.
En EEUU se produjo en 1979 uno de los accidentes nucleares más graves de la historia en la central de Three Miles Island, debido a que temperaturas muy elevadas causaron una fusión parcial del núcleo del segundo reactor y una posterior nube radiactiva.