Condenan a 24 años a un soldado de EE.UU. por el asesinato de tres civiles en Afganistán
- El acusado se ha declarado culpable de tres cargos de asesinato
- Es una de las acusaciones formales más graves por atrocidades del Ejército
Un juez militar ha condenado a 24 años de cárcel al soldado estadounidense Jeremy Morlock por su participación en los asesinatos de tres civiles afganos, en los que también estuvieron implicados varios de sus compañeros. El caso fue filtrado por Wikileaks a finales de 2010.
El caso ha marcado un hito, ya que se trataba de una de las acusaciones formales más graves de presuntas atrocidades cometidas por militares de EE.UU. en los diez años de operaciones en Afganistán, informa Reuters.
La decisión, adoptada por el teniente coronel Kwasi Hawks, se ha tomado después de que el acusado, un especialista de 22 años, se declarase culpable de los tres cargos de asesinato, además de otros de conspiración, obstrucción a la justicia y consumo ilegal de drogas, según Efe.
Inicialmente el juez militar sopesó la posibilidad de sentenciarle a cadena perpetua con posibilidad de libertad condicional, aunque finalmente llegó a un acuerdo con la fiscalía para aplicarle una pena de 24 años de cárcel, según ha indicado la cadena de radio NPR. El acusado podrá optar a la libertad condicional pasados siete años de encarcelamiento, según Reuters.
"El escuadrón de matar"
La declaración de culpabilidad de Morlock, que será oficialmente dado de baja del Ejército, es parte del acuerdo alcanzado con la fiscalía y por el que el juez buscaba el testimonio contra los otros soldados que están acusados de los crímenes, y sobre los que recae una acusación de “asesinato premeditado”, informa Efe.
Todos ellos pertenecían a la 5ª Brigada de la División Segunda de Infantería que en 2010 asesinaron a tres civiles afganos en la provincia de Kandahar. Se hacían llamar "el escuadrón para matar" y sus objetivos eran civiles, añade la misma agencia.
La revista alemana Der Spiegel ha publicado esta semana algunas fotos que los soldados supuestamente tomaron mientras posaban con los cadáveres de sus víctimas.