La CAM confirma su integración en Banco Base y renuncia a la salida a Bolsa de la entidad
- La caja alicantina acepta que el grupo pida la entrada del FROB
- El Banco de España recibe este lunes los planes de viabilidad de las cajas
- El supervisor tendrá hasta mediados de abril para pedir modificaciones
La Caja del Mediterráneo (CAM) ha cerrado la crisis abierta con sus socios en Banco Base al aceptar que ese grupo de cajas -del que forman parte Cajastur y las cajas de Cantabria y Extremadura- solicite la entrada del FROB por valor de 1.447 millones de euros para poder alcanzar así los nuevos criterios de solvencia exigidos por el Gobierno.
Según han explicado a Efe fuentes de la caja alicantina, la CAM ha desistido de su idea de que el Banco Base salga a Bolsa, a cambio de respetar el reparto del accionariado del grupo firmado en su acuerdo de integración.
De esta forma, siempre que este miércoles reciba el visto bueno final de las asambleas de las cuatro cajas, tanto la CAM como Cajastur controlarán un 40% del grupo, mientras que Caja Extremadura poseerá un 11% y Caja Cantabria, un 9%.
Además, en el consejo de administración del Banco Base celebrado a primera hora de este lunes, las cuatro cajas han decidido seguir adelante con su alianza y han aceptado que el Estado entre en su capital, lo que le comunicarán al Banco de España.
En la última semana, la fusión fría entre la CAM, Cajastur, Caja Cantabria y Caja Extremadura se había tambaleado debido a las discrepancias entre las dos entidades más grandes -CAM y Cajastur- sobre la estrategia que debía seguir el grupo para lograr la solvencia requerida. Cajastur prefería recurrir a los fondos públicos, mientras la CAM defendía la salida a Bolsa de la entidad.
Ocho planes de viabilidad para ocho grupos de cajas
Esa estretagia será una de las ocho que reciba este lunes el supervisor bancario, que debe analizar los planes de viabilidad de las cajas que tienen que reforzar su capital para cumplir con los nuevos criterios de solvencia y en los que todas contemplan la petición de fondos públicos, aunque en muchos casos como última opción.
Las cajas o grupos formados por estas entidades que deben reforzar su capital son Bankia, NovacaixaGalicia, CatalunyaCaixa, Banco Base, Banca Cívica, Mare Nostrum, Unnim y Caja España-Duero.
Todos estos grupos deberán explicar al supervisor la estrategia que pretenden seguir para minimizar la eventual entrada del Estado en su accionariado y ofrecer alternativas por si sus planes no se materializaran.
A partir de este momento, el Banco de España tendrá hasta mediados de abril para pedir modificaciones o aceptar los planes de viabilidad que, en algunos casos, recibió hace dos semanas.