El Consejo de Seguridad de la ONU aprueba por unanimidad sanciones contra Laurent Gbagbo

• Congela los activos en el exterior del presidente de facto marfileño
• Piden que traspase el poder al ganador de las elecciones Ouattara
• Las fuerzas rebeldes siguen su avance en ciudades estratégicas

Laurent Gbagbo deberá traspasar los poderes a Alassane Ouattara

El Consejo de Seguridad de la ONU ha aprobado este miércoles por unanimidad una resolución que contempla sanciones contra el gobernante de Costa de Marfil, Laurent Gbagbo, por su negativa a abandonar el poder tras las elecciones del pasado noviembre.

La resolución 1.975 ha sido aprobada por los 15 miembros del máximo órgano internacional de seguridad. En ella se imponen sanciones contra Gbagbo y su círculo de colaboradores más cercano y le piden que traspase el poder al ganador de las elecciones de noviembre, Ouattara.

La adopción de la resolución se produce el mismo día en el que la capital administrativa, Yamusukro, ha caído en manos de las Fuerzas Republicanas de Costa de Marfil (FRCI), favorables a Ouattara, a quien la comunidad internacional ha reconocido como vencedor de los comicios.

Entrada la madrugada del jueves, los rebeldes también han entrado en la estratégica ciudad de San Pedro y según testigos citados por las agencias Reuters y AFP, se están produciendo tiroteos.

Esta batalla puede incluso más importante que la de Yamusukro, una ciudad del centro del país que pese a su capitalidad no hace sombra a Abiyán, mucho más poblada y que concentra el poder financiero y político efectivo.

San Pedro, en el suroreste y cerca de Abiyán, tiene un importante puerto desde donde se exporta la mitad del cacao, del que Costa de Marfil es el primer productor mundial.

Congelados sus activos en el exterior

La resolución de la ONU, propuesta por Francia y Nigeria, impone a Gbago, su esposa y cuatro de sus colaboradores una restricción a todos sus viajes al exterior por "incitar al odio y la violencia". Además, también verán sus activos en el exterior congelados.

El texto pide el cese inmediato de la violencia contra los civiles y que se respete la voluntad del pueblo marfileño y la elección de Ouattara como presidente del país, tal y como lo reconoció la Comunidad Económica de Estados de África Occidental (Cedeao) y la Unión Africana (UA).

La resolución da todo el apoyo a la Misión de las Naciones Unidas en Costa de Marfil (Onuci) para usar todas las medidas necesarias para proteger a la población civil. También subraya la necesidad de que la Onuci lleve a cabo el embargo de armas pesadas usadas contra civiles.

Responsable de la crisis humanitaria

El documento señala a Gbagbo como principal responsable de la crisis humanitaria que atraviesa Costa de Marfil y lo acusa de "obstrucción a la paz y al proceso de reconciliación" en el país.

A su esposa, Simone Gbagbo, quien preside el grupo parlamentario del Frente Popular Marfileño (FPI), también se la acusa de "incitar públicamente al odio y a la violencia".

Los colaboradores de Gbagbo sobre los que también se centra la resolución son Alcide Djédjé, quien fuera el embajador del país ante la ONU; Desiré Tagro, envuelta en la represión violenta de los movimientos populares de noviembre, diciembre y febrero; y Pascal Affi N'Guessan, presidente del FPI.

Fuerzas de Ouattara entran en San Pedro

Gbagbo lleva en el poder desde el año 2000 y durante los últimos años se ha mantenido gracias a una coalición de gobierno, a la espera de la celebración de las elecciones presidenciales que debían haber supuesto una salida al conflicto que enfrentó al país en una cruenta guerra civil entre el 2002 y el 2007.

Sin embargo, tanto Gbagbo como Ouattara fueron investidos como presidentes en dos ceremonias diferentes, lo que desató una crisis en el país africano en la que podrían haber muerto más de 300 personas según la ONU.