La OTAN investigará el bombardeo de civiles libios por parte de la coalición

• El nuevo comandante de las operaciones revisa la denuncia del obispo de Trípoli
• El secretario general de la OTAN se muestra contrario a "armar a los civiles"
• Un portavoz militar dice que pararán cualquier barco con armas o mercenarios

Desde hoy, la OTAN tiene el mando completo de las operaciones militares en Libia

La OTAN ha anunciado que investigará un bombardeo sobre Trípoli que habría causado el pasado miércoles al menos cuarenta muertos y fue denunciado por el vicario apostólico de la capital libia, el obispo Giovanni Innocenzo Martinelli.

"Conocemos esa información. La investigación verá si fuerzas de la OTAN estuvieron o no implicadas en ese incidente", ha señalado el responsable de la operación "Protector Unificado" de la organización, el general Charles Bouchard, en una vídeo conferencia desde el cuartel aliado de Nápoles (sur de Italia).

Bouchard ha añadido que se informará "cuando la investigación esté completada".

Comienzo de las operaciones militares

La OTAN ha tomado este jueves el control total de las operaciones militares en Libia y ha advertido que hará respetar el embargo de armas impuesto por la ONU.

"Nos vamos a centrar en aplicar el embargo de armas (dictado por la resolución), una decisión que afecta a todas las partes implicadas en el conflicto", ha explicado el secretario general de la OTAN, Anders Fogh Rasmussen. Es decir, que se opone a armar a la oposición.

Por si hubiera alguna duda sobre el significado de sus palabras, Rasmussen ha subrayado que la Alianza está en Libia para "proteger a los civiles, no para armarlos".

El Gobierno estadounidense había adelantado que no descartaba armar a los rebeldes, y algunas informaciones afirman que ya el presidente Barack Obama ha autorizado misiones de la CIA en el interior del país para apoyar a los rebeldes, que parecen incapaces de acabar por si solos con el régimen de Muamar el Gadafi.

El presidente del Comité Militar de la organización atlántica, el almirante italiano Giampaolo Di Paola, también se ha manifestado en este sentido.

"Si hoy hay un barco que transporte armas o mercenarios lo pararíamos, pero confío en que ninguno de los aliados esté pensando en hacerlo", ha dicho en rueda de prensa en Bruselas.

Operación Protector Unificado

Di Paola y el general canadiense Charles Bouchard dirigirán la Operación Protector Unificado, que desde las 8 de la mañana del jueves (hora española) controla todas las operaciones sobre Libia.

Hasta ahora, una coalición internacional encabezada por EE.UU., Francia y Reino Unido se había hecho cargo de establecer la zona de exclusión aérea, proteger a los civiles y garantizar el embargo de armas.

En rueda de prensa en Bruselas, Di Paola ha reiterado que la organización militar "actúa estrictamente dentro del mandato de las resoluciones 1970 y 1973".

Las resoluciones excluyen cualquier fuerza de ocupación, lo que en definición de Di Paola significa "fuerzas sobre el terreno que estén ocupando ese terreno".

Cuando a renglón seguido se le ha preguntado por la presencia de fuerzas extranjeras que estén ya en el interior de Libia, Di Paola ha respondido: "no hay fuerzas de la OTAN sobre el terreno, si hay fuerzas de algún país en concreto no es presencia de la OTAN como tal".

No obstante, ha reconocido que la Alianza está usando la información de inteligencia proporcionada por los países miembros, sin valorar "qué tipo de fuentes son".

Por otro lado, el almirante italiano ha asegurado que carece de información sobre posibles víctimas civiles de los bombardeos,  pero ha precisado que la Alianza es responsable "solo a partir de esta mañana", cuando se ha completado el traspado de las operaciones.

Infiltración de Al Qaeda

Di Paola cree posible que elementos de Al Qaeda hayan entrado en Libia durante los combates. "No me sorprende que en una situación como la de Libia, de pérdida de control, pueda aparecer Al Qaeda para aprovechar la situación. Puede que sean individuos, pero no me sorprende", ha explicado.

Por su parte, la portavoz de la OTAN, Oana Lungescu, ha reiterado que "nadie quiere un estado fallido en Libia.  Es importante que la comunidad internacional haya escuchado el llamamiento de la ONU para proteger a la población civil y ayudar al país".