El Gobierno japonés planea hacerse con el control de Tepco, la gestora de Fukushima
- La medida no pretende superar el 50% del control, para evitar la nacionalización
- La compañía desconoce los planes del gobierno sobre la posible intervención
- Las acciones de la eléctrica han subido un 4% al conocerse la noticia
El Gobierno japonés está dispuesto a poner bajo su control a la operadora de la central nuclear de Fukushima, Tepco, a través de una inyección de fondos públicos, según informa el rotativo Mainichi. Sin embargo, la compañía eléctrica desconoce los planes del gobierno acerca de una posible intervención, informa Europa Press.
La medida del Ejecutivo nipón no pretende superar el 50% del control, para evitar que la medida se convierta en una nacionalización. "Será un tipo de inyección que permita al gobierno tener cierto nivel de participación en la gestión", indica un alto funcionario gubernamental en declaraciones al periódico nipón.
La empresa que gestiona la central de Fukushima Daiichi, que resultó seriamente dañada por el terremoto y el posterior tsunami del pasado 11 de marzo, ha sido objeto de numerosas críticas por su actuación, especialmente por la falta de toma de decisiones en la gestión de la crisis, que ha levantado la alerta mundial.
Tepco, la empresa de energía eléctrica más grande de Asia, recibió este jueves una línea de créditos de urgencia por unos 24.000 millones de dólares -unos 17.000 millones de euros- de la banca privada para hacer frente a sus monumentales costes, informa Efe.
Además, las acciones de la gestora de Fukushima han caído casi un 80% desde el desastre, según la agencia Reuters. Sin embargo, las acciones de la compañía han subido un 4% tras conocerse la noticia de la intervención estatal en la compañía, según RNE.
Compensaciones multimillonarias
La eléctrica puede hacer frente a compensaciones multimillonarias porque, entre otras cosas y a parte de la destrucción de parte de la central nuclear, las fugas de los reactores han provocado la evacuación de miles de japoneses en un radio de 20 kilómetros de la central.
Una zona de evacuación que, tanto el Organismo Internacional de la Energía Atómica (OIEA) como la Agencia de Seguridad Nacional, han recomendado ampliar por los altos niveles de contaminación registrados en el pueblo de Lilate, situado a 40 kilómetros de la central.
En los últimos días, la radiactividad en el mar japonés se ha disparado y ha llegado a superar en 4.385 veces el límite legal, mientras que este jueves Tepco hallaba niveles de radiación 10.000 veces superiores a los límites legales en aguas subterráneas de la central.