Zapatero dice no....¿y ahora quién?

• El debate sucesorio en torno a Zapatero lleva meses coleando
• Rubalcaba, Chacón, Blanco, Bono o Patxi López, nombres que suenan

Tras las elecciones de mayo, el PSOE abrirá el proceso de primarias

Primera duda despejada:Zapatero no será candidato a la presidencia del Gobierno en 2012. Ahora queda por saber quien encabezará el proyecto socialista en un momento nada halagüeño para el PSOE y con unas encuestas que dan una clara ventaja al PP de cara a las elecciones generales.

El debate sucesorio en torno al presidente del Gobierno lleva meses coleando. El propio Zapatero se ha negado a hablar del tema y eso que la pregunta de si será candidato en el 2012 le ha perseguido en cada acto y en cada entrevista. Con la boca más o menos pequeña todo el partido ha dicho que la primera opción seguía siendo Zapatero pero el baile de nombres no ha cesado.

A la cabeza en las quinielas siempre ha estado el vicepresidente del Gobierno y ministro de Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba. Su nombre ha sonado con mucha fuerza, pero no es el único. Carme Chacón, José Blanco, Patxi López, José Bono, Guillermo Fernández Vara o Tomás Gómez, entre otros, también forman parte de ese grupo de nombres que circula con más o menos acierto o credibilidad en los mentideros políticos.

La presión mediática ha sido muy alta en los últimos meses. Hay ansia por conocer al rival de Mariano Rajoy. Y ante tanta duda, aumentan las especulaciones y el run run político.

Candidatos virtuales

• Alfredo Pérez Rubalcaba, el todopoderoso

Todo el mundo le sitúa, y con ventaja entre sus compañeros, como el más que posible sustituto de Zapatero. Sobre todo, desde que el presidente le cedió en la última remodelación del Gobierno un poder como nunca antes había tenido un vicepresidente en el Ejecutivo. Se ha convertido en el protagonista del Gobierno, ha asumido funciones del propio presidente y se ha hecho omnipresente en los medios.

Con esta decisión, Zapatero ¿le convertía en su escudero ante su gran desgaste derivado de la crisis o le colocaba como claro sucesor en La Moncloa? Político experimentado donde los haya, no se arredra facilmente ante el adversario y cuenta con el apoyo del partido. Su candidatura, a priori, levantaría pocas ampollas en el PSOE. Le da, eso sí, argumentos fáciles al PP para utilizar en su contra en campaña. Tiene mucho pasado y eso muchos lo ven como un lastre.

El número dos del Gobierno se ha cansado de decir que éste no era ni el momento ni el lugar cada vez que le han preguntado en los últimos meses sobre su posible candidatura. Incluso, en una entrevista en RNE en el mes de diciembre, confesó sentirse más cerca del final de su carrera política que al principio de nada. ¿Jugaba al despiste?

El presidente del Congreso, José Bono, presente siempre en estas quinielas electorales, le definió como "liebre eléctrica que hace correr a los perros" cuando le preguntaron hace unos meses por la posible candidatura de Rubalcaba. Incluso hablaban de él y no salió mal parado los papeles de Wikileaks donde resaltaban sus aptitudes políticas.

• Carme Chacón, el relevo generacional

Muchos creen que podría convertirse en la primera mujer presidenta del Gobierno. Juega sus cartas en el PSOE sin hacer mucho ruido pero lo cierto es que desde hace años se habla de la denominada Operación Chacón. Es del círculo más íntimo de Zapatero, que la puso al frente del Ministerio de Defensa, convirtiendo a una mujer, por primera vez en la historia, en jefa de una de las áreas más importantes y comprometidas del Estado.

Curiosamente ella y Rubalcaba son los ministros mejor valorados en la última encuesta del CIS. Su candidatura supondría el colofón a un legislatura en la que Zapatero ha hecho de la igualdad una de sus principales señas de identidad.

Catalana pero no nacionalista, tiene buen imagen y supondría el relevo generacional que no ofrece Rubalcaba. En su contra está la falta de experiencia para aspirar a la presidencia del Gobierno aunque el presidente se ha encargado de que haga un verdadero master institucional en los últimos años.

Como vicepresidenta del Congreso de los Diputados se empapó de la actividad parlamentaria y forjó buenas relaciones con diputados de todos los partidos. Ahora como ministra de Defensa manda en los Ejércitos y en la Guardia Civil, tiene acceso al Centro Nacional de Inteligencia (CNI) y desarrolla labores de política exterior.

• José Bono, el eterno

Parece que él mismo se ha apartado de la carrera electoral. "Ni estoy ni se me espera", ha dicho ante la posibilidad de convertirse en sucesor de Zapatero, con el que ya compitió en 2000 para hacerse con el partido. Entonces perdió por nueve votos. Ahora parece no tener muchas ganas de competir habiendo amagado ya con dejar la política definitivamente.

Cierto es que ha demostrado su tirón electoral en Castilla-La Mancha y tiene mucha experiencia en gestión. También que atrae un voto de centro, lo que podría convertirse en un problema para los sectores más a la izquierda del PSOE.

Muchos soñaban hace años con un enfrentamiento entre él y Alberto Ruiz Gallardón, ambos versos sueltos de sus respectivos partidos, pero ese escenario parece poco probable en el 2012.

• José Blanco, el poder en el partido

Desde que Zapatero le otorgó la cartera de ministro de Fomento, Blanco ha mejorado su imagen entre la ciudadanía. Ha reiterado en numerosas ocasiones que no está en la carrera electoral y siempre ha situado su recorrido político junto al de Zapatero.

Su poder en el PSOE en indiscutible. Manda en Ferraz y su capacidad de maniobra en el partido es total, pero no destaca por su carisma como político.

• Patxi López, el tapado

Opción arriesgada, muchos hablan del lehendakari como el tapado del PSOE para relevar a Zapatero. Consiguió levantar de la silla a Juan José Ibarretxe en el País Vasco, empresa más que difícil. Su capacidad de diálogo ha sido clave para crear un oasis de consenso con el PP en Euskadi en un momento de crispación política nacional sin precedentes.

Todos los partidos le reconocen su capacidad política y su valentía, pero lo cierto es que ha perdido algo de fuelle desde que fue nombrado lehendakari.

• Tomás Gómez, el rebelde

Echó un pulso al mismísimo Zapatero y le ganó. Suyo fue el órdago a Ferraz negándose a dejar el paso libre a la candidata que prefería el presidente para enfrentarse en Madrid a Esperanza Aguirre, Trinidad Jiménez. Forzó unas primarias y se llevó el gato al gua por partida doble.

Demostró su poder en el siempre convulso Partido Socialista de Madrid y se hizo una campaña mediática espectacular que nunca hubiera conseguido de no enfrentarse a la ministra de Exteriores.

Su capacidad de superación es indiscutible y muchos le veían como el futuro Zapatero pero su éxito electoral se reduce a un municipio madrileño, Parla. Además, muchos liman las uñas para arañarle si pierde con Aguirre por lo que consideran traición al aparato federal del partido. Se antoja harto difícil que consiguiera el consenso necesario en el partido para postularse como candidato.