Francia restringe la entrada de inmigrantes tunecinos a los que Italia ha dado permiso de residencia
- Los inmigrantes que quieran entrar en Francia deben cumplir cinco condiciones
- Italia les ha proporcionado permisos temporales por motivos humanitarios
- 22.000 inmigrantes han llegado a Lampedusa desde enero
Francia ha decidido establecer restricciones para evitar que miles de inmigrantes del norte de África puedan entrar en el país, después de que Italia haya decidido darles permisos de residencia temporal "por motivos humanitarios".
Con estos permisos, los miles de inmigrantes, en su mayoría tunecinos, que han llegado a la isla italiana de Lampedusa desde enero podrían viajar por todos los países del espacio Schengen.
Sin embargo, y según informa el diario Le Figaro, las autoridades francesas han enviado una circular a los prefectos (delegados del Gobierno) según la cual "los ciudadanos de países terceros portadores de un permiso de residencia emitido por un Estado miembro (de la UE) no pueden considerarse en situación regular" a menos que cumplan cinco condiciones.
Estas son: llevar un documento de viaje en vigor y reconocido por Francia; tener un permiso de residencia válido; "justificar recursos suficientes" (62 euros por día y por persona); "no constituir una amenaza para el orden público" y "no haber entrado en Francia desde hace más de tres meses".
22.000 inmigrantes en Italia
Desde enero han llegado a las costas italianas 22.000 inmigrantes que huyen de las revueltas sociales en Túnez y de la guerra de Libia. Este miércoles, una barcaza con más de 200 personas a bordo naufragó frente a Lampedusa, con un saldo de 20 muertos y 150 desaparecidos.
Los gobiernos italiano y el tunecino acordaron dar permisos temporales a los inmigrantes que ya se encontraban en Italia, pero repatriar a los que llegaran a partir de ahora. "La gran mayoría de los inmigrantes quiere reunirse con sus allegados en Francia o en otros países europeos", ha dicho el ministro de Interior italiano, Roberto Maroni.
Los responsables de Interior de Francia e Italia tienen previsto reunirse este viernes para "definir un sistema de intervención común que implique a todos los países de la Unión Europea", según Maroni.
Restricciones a la inmigración legal
Por otra parte, el ministro francés de Interior, Claude Guéant, ha anunciado que se va a reducir la concesión de permisos de residencia a nuevos inmigrantes, un endurecimiento de la política que hasta ahora se centraba en la lucha contra los sin papeles.
"He pedido que se reduzca el número de personas admitidas para la inmigración laboral" a 20.000 al año y "vamos a seguir reduciendo el número de extranjeros que vienen a Francia con el reagrupamiento familiar" a 15.000, ha declarado Guéant.
Sobre los inmigrantes clandestinos, ha recordado que el objetivo de su Gobierno es expulsar este año a 28.000 y añadió que "francamente, espero que haremos más".
En los ocho primeros meses del pasado año, se expidieron 122.246 permisos de residencia de larga duración para inmigrantes llegados a Francia, un 9,7 % más que en el mismo periodo de 2009. Argelinos y marroquíes fueron de nuevo los más numerosos.