El rescate de Portugal rondará los 80.000 millones de euros y estará listo en mayo
- Las medidas del Gobierno Sócrates servirán de base para los ajustes
- El programa de reformas incluirá un "ambicioso" plan de privatizaciones
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El importe de la ayuda financiera externa que recibirá Portugal podría rondar los 80.000 millones de euros, según el comisario de Asuntos Económicos y Monetarios, Olli Rehn, quien ha destacado que ese cálculo es "muy, muy preliminar". Lisboa empezará de inmediato a negociar las condiciones de su rescate, con el objetivo de que el programa de ajustes y reformas esté listo a mediados de mayo, de manera que pueda aplicarse justo después de las elecciones generales del 5 de junio.
En una rueda de prensa posterior a la reunión informal de los ministros de Economía de la Unión Europea, el comisario ha añadido que la ayuda financiera se articulará de forma "flexible" y en un marco plurianual de 3 años, "posiblemente".
Según el presidente del Eurogrupo, Jean-Claude Juncker, ese programa tomará como "punto de arranque" el paquete de medidas propuesto por el actual gobierno portugués el pasado 11 de marzo, que fue rechazado por el Parlamento luso, lo que provocó la dimisión del Ejecutivo y la convocatoria de elecciones.
Rehn ha reconocido que esas medidas no podrán ser iguales porque fueron recibieron el rechazo parlamentario luso, pero serán similares. Precisamente, El ministro de Finanzas luso, Teixeira dos Santos, ha avanzado este viernes que su Gobierno no negociará con la oposición el plan de ajuste que se impondrá a Lisboa a cambio del rescate de 80.000 millones de euros y ha defendido que corresponde a la UE y al Fondo Monetario Internacional (FMI) llevar a cabo esta negociación.
En una rueda de prensa celebrada por la tarde, el comisario Olli Rehn, ha dejado claro que cualquier rescate tiene que venir precedido de un plan del gobierno para garantizar su recuperación, y ha señalado que "confía en que los partidos políticos de Portugal sean conscientes de la responsabilidad que tienen para superar las dificultades".
Fuera de la rueda de prensa, el ministro de finanzas finlandés, Hyrki Katainen, ha ido más allá y ha dicho que "el plan debe ser más duro y más completo que el que el parlamento rechazó" porque, "de lo contrario, no tiene sentido avalar el crédito de nadie".
"Un ambicioso" programa de privatizaciones es "esencial"
Debido a la complicada situción política del país, tanto el comisario como el presidente del Eurogrupo han subrayado que se debe alcanzar un acuerdo con todas las fuerzas políticas del país, porque quien gane los comicios deberá aplicar duros ajustes nada más llegar al gobierno.
Juncker ha explicado que el programa de ajuste deberá incluir un estricto ajuste fiscal, reformas estructurales que eliminen "rigideces" en el mercado laboral y en el de productos y una reestructuración del sistema financiero del país. Además, el representante de los ministros de Economía y el comisario han subrayado como "esencial" que se elabore "un ambicioso" plan de privatizaciones.
Además, Rehn ha especificado que el rescate incluirá "una partida específica para la estabilidad financiera y para medidas para mantener la liquidez y la solvencia en el sector bancario", aunque el comisario no ha cifrado su montante.
El Eurogrupo -reunión de los ministros de Economía y Finanzas de la Eurozona- pretende aprobar ese programa en su reunión del 16 de mayo. En ese momento se aprobará también el rescate de 80.000 millones. El fondo de rescate necesitará 10 días más para obtener el dinero en los mercados.
A juicio de Olli Rehn, la petición de ayuda por parte de Lisboa es "un movimiento responsable para salvaguardar la estabilidad financiera en Europa y ayudar a Portugal a superar sus dificultades".
El contagio no llega a España
Por su parte, el responsable del actual fondo de rescate de la UE, Klaus Regling, ha destacado que el contagio de las crisis entre economías se ha frenado en Portugal y no ha alcanzado a España.
"El mercado de deuda español no se ha contagiado. Su riesgo se ha reducido desde comienzos de año en torno a 150 puntos básicos, mientras que el de la deuda portuguesa ha seguido aumentando. Los bonos de España se siguen vendiendo, mientras que los de los otros tres países no tienen mercado", ha señalado Regling.
"Los mercados ya entienden mejor los fundamentos de las economías y, por eso, el riesgo de contagio es mucho menor que hace seis o nueve meses", ha sentenciado.
Regling ha asegurado que "los mercados han reaccionado de forma muy positiva a la petición de ayuda de Portugal, ya que la opinión general es que este paso refuerza a las tres economías más débiles de la Zona euro".