El Gobierno duplica las desgravaciones fiscales por la rehabilitación de vivienda
- Incrementa la deducción del IRPF del 10% al 20%
- Se podrá aplicar también a las reformas en la segunda vivienda
El Gobierno aumentará del actual 10% hasta un 20% las desgravaciones fiscales aplicables a la rehabilitación de viviendas, y permitirá que beneficien también a las reformas de la segunda vivienda, según se ha aprobado este viernes en el Consejo de Ministros.
En el decreto ley actual se podía rebajar el IRPF cuando se rehabilitaba la vivienda habitual, pero ahora esas desgravaciones se extenderán a la segunda vivienda y a las puestas en alquiler, "con la única excepción de que no estén afectas a actividades económicas por parte del contribuyente", aclara la nota del Ministerio de Economía.
Según ha explicado el vicepresidente primero del Gobierno, Alfredo Pérez-Rubalcaba, el principal objetivo de esta medida es "crear empleo en ese sector, mejorar las condiciones del parque inmobiliario y aumentar la eficiencia energética" de los edificios.
"Esta medida beneficia a todo el mundo, y pensamos que era bueno pegarle un empujón", ha señalado Rubalcaba.
La deducción será, como hasta ahora, de carácter temporal, ya que solo podrá aplicarse a las obras realizadas antes del 31 de diciembre de 2012.
El máximo desgravable será de 20.000 euros en varios años
El mínimo anual desgravable subirá también hasta los 6.750 euros, mientras que hasta ahora se permitía desgravar un límite máximo de 4.000 euros al año por contribuyente.
El máximo deducible plurianual pasa de los 12.000 euros actuales a 20.000 euros.
También sube la renta de los contribuyentes que podrán beneficiarse de estas deducciones: aquellos con una base imponible igual o inferior a 53.007,20 euros podrán aplicarse la totalidad de la deducción. A partir de esa cantidad, se rebajará progresivamente hasta quedar a cero para los contribuyentes con una base imponible superior a 71.007,20 euros.
En el anterior decreto, sólo podían desgravarse la deducción completa aquellos con ingresos inferiores a 33.007 euros anuales y los que contaban con más de 53.007,20 euros no podían aplicarse ninguna deducción.
Solo obras de mejora energética o de accesibilidad
Las obras de reforma que podrán deducirse del IRPF serán aquellas destinadas a la mejora de la eficiencia energética y del uso del agua, las relativas a accesibilidad y la instalación de infraestructuras para el acceso a internet o a la TDT. Por tanto, no podrán incluirse obras en garajes, jardines, parques, piscinas
u otros elementos deportivos.
Además, el Gobierno advierte que esta deducción es "incompatible con la deducción por inversión en vivienda cuando se trata de obras susceptibles de acogerse a ambos incentivos", por lo que deberá aplicarse solo uno de ellos.
Estas modificaciones se introducirán en el mismo decreto ley del nuevo plan de afloramiento de empleo sumergido que el Ejecutivo espera poder aprobar el Consejo de Ministros del 29 de junio, una vez se haya logrado el apoyo de los agentes sociales.
Estas deducciones por obras de mejora en la vivienda habitual se crearon dentro del Real Decreto Ley de Medidas para el Impulso de la Recuperación Económica y el Empleo -derivado de los llamados Pactos de Zurbano-que se aprobó en el Consejo de Ministros del 9 de abril de 2010.