Sarkozy promete al líder de los rebeldes libios intensificar el apoyo a la revolución
- El jefe de los rebeldes ha invitado a Sarkozy a Bengasi
- Será la primera vez que se ha reunido Sarkozy con los rebeldes
El presidente francés, Nicolas Sarkozy, se ha reunido con el presidente del Consejo Nacional de Transición (CNT) de los rebeldes libios, Mustafá Abdelyalil, este miércoles en París, en un intento de las fuerzas occidentales por romper el estancamiento al que ha llegado el conflicto que dura ya dos mese y para ello, Francia ha prometido aumentar su ayuda.
Ambos dirigentes han hablado en la sede de la Presidencia durante cerca de 45 minutos sobre la manera de "intensificar el apoyo acordado a la revolución libia". En estas conversaciones, Sarkozy ha prometido que Francia intensificará los ataques aéreos sobre las tropas de Muamar el Gadafi
El líder de los opositores ha indicado a la prensa que "Francia y todos los países que han mostrado su apoyo tendrán un papel muy importante en el proceso de desarrollo del país".
Abdelyalil ha adelantado que ha invitado a Sarkozy a visitar Bengasi, fortaleza de los rebeldes, y ha calificado ese próximo viaje, sobre el que no se han facilitado fechas, de "extremadamente importante para la moral de la revuelta".
Esta reunión ha sido la primera vez que Sarkozy, el primer líder extranjero que reconoció al Consejo Nacional de Transición de los rebeldes, se reuna con Jalil, quien fue ministro de Justicia de Gaddafi.
Combatientes "a su pesar"
El representante del CNT ha querido recordar que los opositores "se convirtieron en combatientes a su pesar", debido a que la manifestación "pacífica" iniciada para defender sus derechos "fue reprimida por la fuerza", pero consideró que "la ley" está de su lado y "gracias a la ayuda de Dios se encontró apoyo en el exterior".
En su intervención ante los medios, Abdeljalil ha expresado además su compromiso de "trabajar por la edificación de un Estado democrático", y ha reiterado que el próximo líder del país contará con el poder que le otorguen las urnas, y no las armas.
Asimismo, ha expresado la voluntad de "luchar contra el terrorismo, combatir la emigración ilegal y la trata de seres humanos", un asunto sobre el que ha considerado que ha sido "muy nocivo" para el pueblo libio.
Abdelyalil ha agredecido a todos los países la ayuda a los rebeldes, y ha saludado especialmente a Catar y los Emiratos Árabes Unidos, dentro del conjunto de naciones árabes, "alguna de las cuales se retrasó algo respecto a otros a la hora de mostrar su apoyo, pero hay que tener en cuenta que cada una tiene su propia situación".
Posibles elecciones
El ministro de Relaciones Exteriores de Libia, Abdul Ati al-Obeidi, ha asegurado este jueves que el Gobierno podría celebrar elecciones, incluyendo a Gadafi en el futuro, si los ataques aéreos de Occidente se detienen.
"Si los bombardeos paran -ha asegurado Al Obeidi- después de seis meses podría haber elecciones supervisadas por la ONU", ha informado la radio BBC. "El ministro de Relaciones Exteriores ha señalado que las elecciones podrían cubrir los objetivos planteados por los libios, y cualquier persona podría presentarse, incluso el propio Gadafi, como líder", ha añadido.
Al Obeidi ha criticado también la decisión de Reino Unido de enviar militares a los rebeldes para asesorarles. Y es que el martes, los Gobierno británico aseguraba que enviaría militares para asesorar a los rebeldes en organización y comunicación, pero no les entrenaría o armaría a los combatientes. Francia también señala que se opone a poner tropas sobre el terreno en Libia.
El ministro ruso de Exteriores, Sergei Lavrov, ha advertido que el apoyo aéreo permitía a los rebeldes negarse a sentarse a negociar.
"El Consejo de Seguridad nunca ha estado dirigido a derrocar el régimen libio", ha señalado en Belgrado.
Alto al fuego en Misrata
Las Naciones Unidas han pedido un alto al fuego en Misrata, alegando que al menos 20 niños habían muerto en los ataques de las fuerzas del Gobierno asediado.
Precisamente en la tercera ciudad libia, donde se cree que cientos de personas han muerto por los bombardeos y el fuego de francotiradores de las fuerzas de Gaddafi, el foco de los esfuerzos se centra en proteger a los civiles atrapados.
Después de nueve semanas desde que estallara la rebelión, inspirada en otros levantamientos contra gobernantes autocráticos árabes, la campaña de la OTAN que ha estado enfocada en pervenir ataques contra civiles no ha logrado detener el bombardeo.
Niños muertos y heridos
Los niños son los principales víctimas de esta guerra y podría ser peor sin un alto al fuego, según las Naciones Unidas. "Tenemos verificadas las muertes de al menos 20 niños. Además, habría muchos más heridos debido a la metralla de morteros, tanques y heridas de bala", ha advertido Marix Mercado, del fondo de UNICEF a los niños de la ONU.
Grupos de ayuda aseguran que alimentos, medicinas y otros artículos de primera necesidad son escasos en la ciudad. Asimismo miles de víctimas y los trabajadores extranjeros están esperando en el puerto a ser evacuados.
El Programa Mundial de Alimentos ha explicado que, con el acuerdo de Libia, se han enviado ocho camiones desde Túnez con 240 toneladas de alimentos -suficiente para 50.000 personas durante 30 días- a las ciudades en el oeste de Zauiya, Zintan y Nalut, que en su mayoría están bajo el control de Gadafi después de que los levantamientos fueron aplastados.
Funcionarios libios niegan que las tropas gubernamentales estén bombardeando Misrata. Los rebeldes, que cuentan con apoyo de un amplio sector de la sociedad libia, dicen que quieren crear un Estado democrático, laico y con un sistema con elecciones libres.