Nuclear, no grazie

• El desarrollo de la energía nuclear fue un pilar de la campaña de Berlusconi
• Solo el 17% de los italianos apoyan la construcción de centrales nucleares

El Senado romano ha dado el visto bueno a lo que el gobierno había ya decidido hace un par de semanas: se paralizan los planes nucleares de Italia.

El desarrollo de la energía atómica buscando la autosuficiencia energética fue uno de los pilares de la campaña electoral de Berlusconi y una de las primeras cuestiones aprobadas en Consejo de Gobierno. Ahora se disuelve en el pavor radiactivo por el accidente de la central japonesa de Fukushima.

La última encuesta del instituto IPSOS no deja muchas dudas: sólo el 17% de los italianos es favorable a la implantación de nuevas centrales nucleares. Hace tres años era el 51%.

El ministro de Desarrollo Económico, Paolo Romani, asegura que la energía atómica solo volverá cuando los decida Europa en una disposición coordinada. En una entrevista en Il Sole 24 Ore, el responsable de Industria indica que habrá que esperar a ver todas las consecuencias que tiene el accidente de Japón antes de adoptar ninguna decisión. Y entre tanto, el gobierno italiano planea relanzar la implantación de energías renovables.

La energía atómica está aparcada pero la perífrasis procedimental obliga a la Corte Constitucional a anular el referéndum nuclear que debía celebrarse el 12 y 13 de junio. En este momento todavía se mantiene el referéndum sobre una cuestión que ya ni siquiera se plantea.