Un nuevo comparador de precios permite conocer las mejores ofertas de luz y gas
- La mejor oferta para un hogar tipo es de 983 euros anuales
- La Tarifa de Último Recurso para un hogar tipo asciende a 1.009 euros anuales
- El bono social supone un descuento del 15% respecto a la tarifa regulada
Visite el comparador de precios de la CNE
Contratar el suministro de electricidad y de gas en el mercado libre es de media la opción más barata para los consumidores domésticos, según se desprende del comparador de precios que este martes ha puesto a disposición de todos los usuarios la Comisión Nacional de Energía (CNE).
La nueva herramienta, en la página web del regulador energético, permite a los consumidores consultar las ofertas de gas y luz más competitivas y que mejor se adaptan a sus necesidades según su perfil específico y atendiendo a su ámbito territorial.
Las mejores ofertas de suministro de electricidad en el mercado libre apenas suponen un ahorro del 2,5%, o de unos 25 euros al año, con respecto a la tarifa regulada de último recurso (TUR) de la que pueden disfrutar los consumidores domésticos, según se aprecia en el nuevo comparador de precios de luz y gas presentado por la Comisión Nacional de la Energía (CNE).
La mejor oferta es de 983 euros anuales
A pesar de recoger cerca de 400 ofertas de 18 comercializadoras, el comparador pone de manifiesto que en el contexto de liberalización las diferencias que hay entre contratar estos servicios en el mercado libre o bien optar por la Tarifa de Último Recurso (TUR) -la única que fija el Gobierno desde julio de 2009-, son escasas aunque los que acuden al mercado pueden acceder a precios ligeramente inferiores.
Por ejemplo, para un hogar tipo con un consumo de electricidad de 5.000 kilovatios-hora (kWh) al año, la mejor oferta en el mercado libre ronda los 983 euros anuales frente a los 1.009 de la tarifa regulada.
Entre las catorce primeras ofertas presentadas por la herramienta, existe una diferencia de 108 euros entre la más cara y la más barata. En cada una de ellas se indican, ya sea en una ficha o a través de un 'link' con el contrato tipo, aspectos que también deben ser tenidos en cuenta, como el periodo de permanencia, los criterios de revisión de precios o el número de teléfono de contratación, pocas veces gratuito.
Menos competencia en España
A diferencia de otros países europeos, donde la diferencia entre la oferta más cara y aquella más barata puede variar hasta en un 20%, en España continúan siendo similares por el momento.
Sin embargo, desde el organismo consideran que esta plataforma constituye un elemento de presión que contribuirá a que las empresas comercializadoras de gas y electricidad sean más competitivas y puedan mejorar sus prestaciones.
Asimismo, inciden en que, en un modelo de liberalización del suministro, debe exigirse que los precios de la energía se formen de manera eficiente, una actitud competitiva de los agentes para captar clientes y una capacitación de los usuarios para elegir la opción que más les convenga.
Reforzar la competencia y conocer la factura
Las ofertas reflejadas en el comparador, que constituyen una verdadera "foto del mercado", según lo ha calificado el director de Relaciones Externas de la CNE, Rafael Durán, se irán actualizando de manera progresiva en función de las revisiones que se realizan cada tres meses.
El comparador de precios, cuyos datos son simples estimaciones que en ningún caso tienen un compromiso contractual, permite también a los usuarios conocer de una forma más detallada el contrato correspondiente a cada oferta, así como los servicios adicionales y la forma de contratarlo.
Para la presidenta de la CNE, María Teresa Costa, la plataforma responde a las necesidades de los consumidores, al tiempo que refuerza la competencia entre los agentes, la transparencia del mercado y el grado de libertad de los clientes a la hora de conocer y optar por la tarifa que mejor se adapte a sus necesidades.
Por otro lado, para facilitar la comprensión de las facturas de luz y gas, la CNE espera presentar al ministerio de Industria antes de julio una propuesta para estandarizar los contratos y las tarifas, de forma que el usuario pueda consultar en su factura su potencia así como el consumo del año anterior.
En la actualidad, hay 21,9 millones de clientes de luz acogidos a la tarifa regulada, frente 4 millones en el mercado.
Descuentos para usuarios con bono social
Desde julio de 2010, los clientes con potencias inferiores a 10 kilovatios (kW) pueden elegir entre acogerse a una tarifa regulada cuyo precio fija trimestralmente el Gobierno o pasar al mercado libre. Otros 2,8 millones de usuarios están acogidos al bono social y se benefician de una congelación del recibo hasta 2012.
En la actualidad, esta congelación equivale a un descuento del 15% con respecto a la tarifa regulada. En el caso del ejemplo presentado por la CNE, los consumidores del bono social, entre ellos pensiones mínimas, familias con todos los miembros en paro, familias numerosas y tarifas sociales, pagarían 811 euros al año, o 198 euros menos que con la tarifa regulada.