El ejército de Costa de Marfil abate a tiros a un guerrillero pro-Ouattara que se negó a desarmarse
- El propio Gobierno ha informado de su muerte en un enfrentamiento
- Dirigía una milicía que combatió junto a las tropas del presidente
El líder de una milicia que ayudó al presidente de Costa de Marfil, Alassane Ouattara, a derrotar a su rival, Laurent Gbagbo, y a tomar el control del país, ha muerto tiroteado en un enfrentamiento con las tropas oficiales después de que se negara a entregar las armas.
“Puedo confirmar que Ibrahim Coulibaly ha muerto tras los enfrentamientos de hoy (por este miércoles)” ha informado a Reuters el portavoz del ministerio de Defensa marfileño, el capitán Alla Kouakou León.
La lucha estalló en el barrio de Abobo, en Abidyán, cerca de la sede de la milicias de Ouattara. Una fuente citada por Reuters que ha preferido mantener el anonimato ha dicho que Coulibaly y sus guardaespaldas han sido atacados tras unas conversaciones para lograr el desarme.
"Es en este contexto que el ejército de Costa de Marfil (FRCI) tomó posiciones alrededor de nosotros y lanzó una ofensiva contra nuestra sede", ha dicho el portavoz.
El líder guerrillero y sus fuerzas habían incumplido la fecha límite impuesta por el Gobierno de Ouattara para entregar las armas y unirse al ejército
Orden de desarme
El presidente marfileño ordenó el pasado viernes a los soldados de todas las partes del conflicto volver a sus cuarteles el viernes en un esfuerzo por restaurar la estabilidad.
Coulibaly, que la semana pasada prometió lealtad a Ouattara, dijo que sus 5.000 hombres estaban listos para unirse al nuevo ejército. Sin embargo, pidió una entrevista personal con Ouattara en la que rechazó la orden presidencial de desarmarse.
El guerrillero marfileño lideraba el llamado Comando Invisible que luchó junto a los partidarios de Ouattara y que resultó clave en la toma de Abiyán y en la derrota de Gbagbo.
A principios de abril, las fuerzas afines al presidente electo de Costa de Marfil, Alassane Ouattara, comenzaron su asalto final sobre Abiyán, último reducto del expresidente Gbagbo, aunque no consiguieron detenerle hasta el día 11.
Tras la victoria final, el presidente Ouattara hizo un llamamiento a la reconciliación nacional. La ONU y varias organizaciones internacionales denunciaron varias masacres cometidas por ambos bandos durante los enfrentamientos por el control de Costa de Marfil.