La reducción a 110 km/h ahorró 94 millones de euros en compras de petróleo en marzo
- El consumo de crudo se recortó casi un 8% el mes pasado
- Se volvió a niveles de consumo de marzo de 2003
Ver también el especial sobre el precio del petróleo
La reducción de la velocidad máxima a 110 kilómetros por hora en las autopistas y autovías españolas ha supuesto un ahorro de 94,2 millones de euros en importaciones de petróleo durante el mes de marzo, según ha asegurado este jueves el ministro de Industria, Turismo y Comercio, Miguel Sebastián.
El ministro ha precisado que ese ahorro ha repercutido en las arcas públicas, al reducirse las compras exteriores de crudo, por lo que el ahorro del conjunto de los consumidores habrá superado esa cifra, ya que a ese coste debe sumarse lo que pagan de impuestos sobre el combustible.
Según ha explicado en una rueda de prensa, el consumo en el mes de marzo se recortó un 7,9% respecto al registrado en el mismo mes del año pasado (2,39 millones de toneladas). Esta cifra representa el menor consumo registrado en un mes de marzo desde 2003.
El ahorro anual en crudo podría llegar a los 1.150 millones
De acuerdo con las estimaciones de Industria, y aunque la medida no afectó al mes completo, la limitación de la velocidad ha supuesto un ahorro de 177.000 toneladas de combustibles en marzo, equivalentes a 1,1 millones de barriles de petróleo.
La caída del consumo de los carburantes de marzo se debe al descenso de un 12,7% en la gasolina -el mayor desde septiembre de 2001- y de un 6,8% en el gasóleo.
Si se mantiene ese ritmo de reducción del gasto, a cierre del año el Estado se podría ahorrar 1.150 millones de euros en su balanza de pagos.
Según los últimos datos de Eurostat difundidos este jueves, casi la mitad del consumo energético de España proviene del petróleo, una dependencia muy superior a la media de la UE, situada en un 36,6%.
La reducción de la velocidad entró en vigor el pasado 7 de marzo y este jueves el ministro ha evitado avanzar si esa reducción del límite de la velocidad se extenderá más allá del 30 de junio, cuando el Gobierno analizará la situación del precio del petróleo y decidirá si se mantiene.
Para Sebastián, este dato se vincula claramente con el Plan de Ahorro Energético aprobado el 4 de marzo por el Ejecutivo para reducir la factura energética tras el incremento del crudo por los conflictos en el norte de África. Con las nuevas medidas de ahorro energético contenidas en ese plan, el Gobierno pretende reducir el gasto anual en petróleo en 2.300 millones de euros.
El dato de marzo, ha añadido Sebastián, contrasta con el aumento del consumo de un 1,2% de enero y con la ligera caída del 1,6% de febrero. Para abril, el ministro ha destacado que la previsión es que se produzca una nueva caída, a pesar de los mayores desplazamientos por Semana Santa.
Una medida sin fin recaudatorio
Sebastián ha dado la "enhorabuena" y las "gracias" a los ciudadanos, que se han concienciado de la necesidad de ahorrar y ha subrayado que los resultados son "muy significativos" y "mayores de lo esperado", aunque ha reconocido que también han podido influir algo los elevados precios del crudo.
Ha recordado también que las medidas de ahorro no han tenido un fin recaudatorio, ya que el descenso del consumo de carburantes supone menores ingresos en impuestos para el Estado.
Si se tiene en cuenta que la Semana Santa este año ha caído a finales de abril, el consumo de carburantes para automoción en marzo cayó un 8,4%, con lo que quedó en la menor cantidad de combustible vendido desde diciembre de 2002.
Sebastián ha señalado que cada dos meses comparecerá para dar datos de la evolución de la medida.
El suministro de España no corre peligro
Por su parte, el secretario de Estado de Energía, Fabrizio Hernández, ha asegurado este jueves que la evolución de las revueltas políticas en los países del norte de África no supone "ningún riesgo de suministro" para España, pese a su efecto "innegable" en los precios del crudo que, ha mostrado su confianza en que a medio plazo éstos muestren un comportamiento "más estable", según se vayan resolviendo las "incertidumbres".
Durante su comparecencia ante la Comisión de Industria del Senado, Hernández ha explicado que se ha revisado el plan sobre situaciones de emergencia en aprovisionamiento de gas y petróleo, con el objeto de "prever todas las contingencias, aunque sean muy improbables".
En este sentido, se han tenido en cuenta los "escenarios extremos de empeoramiento", como por ejemplo, que las revueltas afectaran al tráfico marítimo en el Canal de Suez o que se extendieran a países de los que España depende más a nivel energético, como Argelia.
La conclusión de esta revisión, según Hernández, es que la diversificación de proveedores "reduce muchísimo" el riesgo de suministro para España, si bien el Gobierno tiene preparado el plan en caso de que esta situación cambie para poder activarlo "en cuanto sea necesario".