Obama dice no haber visto una devastación igual que la provocada por los tornados en Alabama
- Más de 300 personas ha muerto a consecuencia del devastador temporal
- En Alabama se han contabilizado 213 muertos hasta el momento
- Las tormentas y los tornados han provocado graves daños en el sur del país
- Las aseguradoras podrían desembolsar hasta cinco mil millones de dólares
El presidente de EE.UU., Barack Obama, ha asegurado este viernes que "nunca" había visto "una devastación como ésta" al recorrer Tuscaloosa, la ciudad más afectada por los temporales y tornados en el estado de Alabama, donde se han contabilizado hasta ahora 213 de los más de 300 fallecidos en el país.
En una breve declaración a los medios mientras observaba los daños, Obama ha prometido "la máxima ayuda del Gobierno federal".
"Vamos a hacer todo lo que podamos", ha dicho el presidente estadounidense tras visitar algunas de las zonas más perjudicadas por los tornados en la ciudad universitaria de Tuscaloosa.
Tuscaloosa y Rainsville, ciudades peor paradas
El gobernador de Alabama, Robert Bentley, ordenó la movilización de 2.000 soldados de la Guardia Nacional para las tareas de vigilancia, socorro y limpieza, y las autoridades de gestión de emergencias han desplazado 35 equipos de socorro a la ciudad de Tuscaloosa.
El alcalde de Tuscaloosa, Walter Maddox, señaló que se han confirmado por lo menos 38 muertes atribuidas al paso y los daños causados por las tormentas.
En la localidad de Rainsville (Alabama) se han hallado 25 cadáveres cerca de un grupo de viviendas prefabricadas, según el jefe de policía, Charles Centers.
En Tennessee las autoridades advirtieron a los conductores de vehículos que no entren a Alabama sin llenar antes los tanques de combustible, ya que los apagones y la destrucción han dejado sin servicio las gasolineras.
Al menos 300 muertos en el país
En los seis estados del sur de Estados Unidos que fueron azotados por el temporal de lluvias y tornados de los últimos días, el más devastador en varias décadas, según han indicado las autoridades, se han contabilizado al menos 300 víctimas mortales. La agencia de noticias Reuters eleva esta cifra a 310.
Las tormentas y tornados, que arrasaron barrios enteros, dejaron más de un millón de hogares y negocios sin energía eléctrica entre la noche del martes y el miércoles.
Los informes de las autoridades dan cuenta de momento, además de los 213 muertos de Alabama, de 34 en Tennessee, 32 en Misisipi, 15 en Georgia, cinco en Virginia y uno en Arkansas, en lo que supone una de las mayores catástrofes naturales desde el huracán Katrina.
De hecho, las primeras estimaciones hechas por las aseguradoras han calculado los daños: entre dos mil y cinco mil millones de dólares.