Hallada una de las cajas negras del vuelo Río-París siniestrado
- Según informa AFP, la caja está en buen estado
- Ya ha sido remolcada al navío Ile de Sein
Una de las cajas negras del vuelo Río de Janeiro-París que se estrelló en junio de 2009 con 228 personas a bordo, ha sido encontrada este domingo en aguas del Atlántico, según han informado los investigadores.
La caja negra, que registra los parámetros del avión, ha sido encontrada por el submarino robotizado Remora 6.000 a las 18.40 hora peninsular española y ya ha sido remolcada al navío Ile de Sein.
El aparato encontrado es el encargado de registrar los parámetros de vuelo del avión y contiene información clave para determinar los motivos que causaron el accidente aéreo, hasta ahora desconocidos, ha precisado una portavoz de la Oficina de Investigación y Análisis (BEA).
Ha agregado que esta información debe ser completada con la de la otra caja negra, que graba los sonidos y conversaciones que se producen en la cabina del aparato. "Sin los datos de esta caja negra (encontrada), los de la otra tienen muy poco valor", ha asegurado la portavoz.
Aunque por el momento se desconoce el estado en que se encuentra esta caja negra tras haber pasado casi dos años en las profundidades del océano sometida a fuertes presiones, "a partir de las fotos tomadas por el submarino robotizado, parece que éste es bueno, pero no sabremos más hasta poder tener acceso" a ella, ha dicho la fuente.
La semana pasada habían encontrado parte de una de las dos cajas negras, pero se trataba sólo de la carcasa y no contenía datos.
A falta de las informaciones procedentes de las cajas negras, lo único que los investigadores han podido determinar es que el vuelo AF447 sufrió un fallo en las sondas que indican la velocidad del avión, provocado por el hielo.
Sin embargo, la BEA ha advertido de que esas conclusiones no podían explicar por sí solas el accidente y apeló a la prudencia sobre las mismas. Pese a todo, la aerolínea Air France procedió a cambiar todas las sondas de su flota por otras más modernas y resistentes a las bajas temperaturas.